II. Jornada/Encuentro. Eso: Paramilitarismo, escuadrones de la muerte, terror contra-insurgente, feminicidios…Nombrarlo, entenderlo, resistirlo, vencerlo
Hay que tejer resistencias y autonomías entre pueblos y procesos. Participamos ésta vez desde sedes en México, Colombia, Argentina, Ecuador, Perú, personas y colectivos de Grecia, Chile, Wallmapu, Perú, Argentina, Brasil y varios en distintas sedes de Colombia y México.
…Entonces, nos hacemos la pregunta respecto de qué hacer mas allá y mas acá de lo que nos permite el sistema, entendiendo lo que pasa, actuando de manera que seamos más efectivos y de ahí sale el documento que enviamos junto con los insumos (VER VÍNCULOS AL FINAL DEL DOCUMENTO), el texto de la primera provocación y con eso se hizo una primera Jornada-Encuentro. De allí surgen varias propuestas temáticas para seguir, incluida la de continuar con este espacio de encuentro y articulación. Para convocarnos nombramos y decidimos empezar a trabajar el tema que recoge experiencias, miradas, situaciones como “Paramilitarismo y sus correlatos” y nos encontramos. Ahora les compartimos parte de lo que hablamos en esta II. Jornada-Encuentro. O mejor, de lo que compartimos. Una parte, la que pudimos transcribir con la idea de preguntarnos cómo nombrar, entender, reconocer para resistir eso que justamente no sabemos nombrar, esa estrategia y maquinaria de terror que involucra todo eso que cabría en contra-insurgencia, terror, disciplinamiento y control social para y desde el capitalismo; mucho más y de muchos modos pero aunque no alcanza con ser nombrado como lo hacemos desde diversas perspectivas hasta ahora, en el proceso de ir entendiendo e ir resistiendo y abriendo caminos, no sólo lo vamos nombrando: entre todas y muchas lo vamos señalando, reconociendo para resistirlo mejor y no más tan solas y solos. Así No. Dominación y Despojo. Pueblos en Camino
II. Jornada/Encuentro. Eso: Paramilitarismo, escuadrones de la muerte, terror contra-insurgente, feminicidios…Nombrarlo, entenderlo, resistirlo, vencerlo
PEC Moderación:
Pueblos en Camino es una iniciativa en el propósito de aportar a tejer resistencias y autonomías entre pueblos y procesos frente y más allá del capitalismo. No es una institución, ni una organización, ni una estructura. Llevamos años en un proceso que viene de otros procesos de lucha y resistencia, les da continuidad y aprende de experiencias acumuladas. Llevamos un tiempo examinándonos y pensando que hacemos mucho pero no sirve ante el aparato del terror y ocupación. Frente a la escalada agresiva del capitalismo global y continental y a la división y captura de procesos, instituciones, organizaciones, gobiernos, partidos y movimientos, sabemos que todo ha cambiado y no podemos seguir haciendo lo mismo, predecible y recurrente, tanto como resulta agotador e ineficiente. Nos cansamos de oportunismos de todo tipo y de que nuestros discursos y aún nuestras luchas alimenten los protocolos de manejo y administración de la denuncia y de la resistencia por parte del sistema. Eso y también que hoy la lucha anti-capitalista no se reduce a izquierdas y derechas, al sistema y los otros del sistema, sino, justamente a un nosotroas anti-capitalista y un ellos del capital. Esto, que no toleraban las izquierdas ortodoxas y partidarias, institucionales o insurgentes, es una necesidad y una realidad ahora mismo.
Entonces, nos hacemos la pregunta de que hacer mas allá y mas acá de lo que nos permite el sistema, entendiendo lo que pasa, actuando de manera que seamos más efectivos y de ahí sale el documento que enviamos junto con los insumos, el texto de la primera provocación y con eso se hizo una primera jornada-encuentro. De allí surgen varias propuestas temáticas para seguir incluida la de continuar con este espacio de encuentro y articulación. Ahora estamos en este segundo encuentro con la idea de preguntarnos cómo nombrar, entender, reconocer para resistir eso que justamente no sabemos nombrar, esa estrategia y maquinaria de terror llamamos únicamente para provocar clarificaciones y precisiones, “Paramilitarismo y sus correlatos”, pero que involucra mucho más y de muchos modos pero no alcanza con ser nombrado como lo hacemos desde diversas perspectivas hasta ahora.
Se trata, pues, de ver qué es eso de lo que estamos hablando. Qué tiene que ver eso que tiene como énfasis e instrumento el terror, y cómo eso, que es el sistema, cómo se articula globalmente y se aplica localmente de formas a veces distintas, complejas, integrales y articuladas a su vez a todas las relaciones sociales, dinámicas y actividades que definen al capitalismo. Entender ese aparato de terror, guerra, contra insurgencia de y desde el capital es esencial para saber resistir y defendernos, de modo que cada comunidad afectada y amenazada se enfrenta con conocimiento y capacidad, de modo que superemos la costumbre consistente en que sólo expertos e instituciones articuladas e insertadas en la lógica del sistema se ocupen de este tema como si fuera un sector productivo más que vende servicios en el mercado del despojo y del terror. O, peor aún, dejamos que cada grupo o cada persona, amenazados o en riesgo lo enfrenten, incluso sin estar mínima y suficientemente organizados. Así se dan desaparecidos , feminicidios, represiones de todo tipo, aún a quien hace grafitis y un aterrador e ilimitado etc.
Desconocemos y no sabemos cómo enfrentar eso que buscamos reconocer, y, aunque cada uno de nosotrxs trabaja, en cada localidad, en todos los ámbitos, es evidente que mientras mas activismo hacemos más nos fragmentamos, más nos amenazan y más vulnerables y evidentes nos hacemos. Es que nuestra denuncia y resistencia se han incorporado y nutren la agresión y el terror. Pero no proponemos entender primero para resistir después. Eso también es la lógica del capital que hemos adoptado. No. Se trata de ir aprendiendo y haciendo. De hacer aprendiendo, pero no más en la ceguera del activismo y bajo reacciones que nos capturan para el aparato de terror.
En Colombia, aprendimos algunas cosas de cuando se inició esta fase de la agresión total. Por ejemplo, la estrategia asesina a un obrero en una parte, a un campesino en otra, a un dirigente indígena en otro lugar, a una defensora de la naturaleza o de derechos humanos, simultánea o secuencialmente. En cada lugar o en el ámbito nacional, muchas veces con nuestras contrapartes internacionales, habíamos grupos y organizaciones que reaccionábamos en y a cada acción de terror. Cada cual denunciando su pérdida, su muerte, su ira y dolor con sus equipos y estructuras solidarias, pero independientes unos de otros, desarticulados, compitiendo por la solidaridad que, además, se apoyaba en respaldos económicos y políticos sectoriales por los que también teníamos que competir. Así, fragmentariamente, entre más nos mataban más nos fragmentábamos al responder cada quien en su lugar frente a su terror. Pero ellos arriba estaban coordinados para matarnos en todos lados. Es peor, nos agredían y agreden así, para que nos fragmentemos. Nos apoyan para que nos organicemos para fragmentarnos. Nos organizamos para dividirnos en función del terror que nos divida. Ayudamos a la división del trabajo del terror en función de sus objetivos estratégicos y privatizada queda tanto la solidaridad como la infamia.
Hace muchos años el entonces Presidente Bill Clinton dijo: “Es la economía, estúpido”. Eso, justamente es lo que hay que entender como sustrato y fundamento de abordar el tema que nos convoca. Siempre está la acumulación, la explotación, la ganancia como trasfondo. Así, simultáneamente la maquinaria de terror es un gran negocio mundial, de modo que seguridad, defensa, contra insurgencia, guerra y todos los sectores afines son, si no el sector económico más grande del capitalismo global, sí uno de los mayores y, según se le estudie, uno que tiene relación con todas las demás actividades del capital, pero también y de manera creciente, seguramente, en el contexto de crisis del capitalismo, el mayor sector de la economía y cada vez más, el capitalismo como un todo. El capitalismo, según parece, acumula en torno de seguridad, defensa, contra insurgencia y guerra. Simultáneamente, todas estas actividades rentables le ayudan al capital a resolver su crisis por vía del terror, masacres y los demás componentes de ésta estrategia integral que somete, paraliza, subordina, convence y elimina excedentes. No hay que pensar solamente en paramilitares o ejércitos del terror. Hoy que entender las relaciones, los mercados, las inversiones, las coordinaciones. Desde compañías de seguros y seguridad, especulación financiera, ejércitos, equipos de comunicación y seguridad. Desde armamento y uniformes, hasta alimentación comunicaciones, créditos y réditos, territorios y recursos ocupados, generación de empleo, reducción de costos de explotación del trabajo y mucho más. Esta guerra es un negocio total. Se trata de ir componiendo poco a poco esta perspectiva compleja, completa, pero también simplificada y clara. De apropiárnosla desde la experiencia y vivencia locales. De sacarla de los archivos de expertos y del mercado de especialistas para que sirva a las resistencias-alternativas inseparables desde abajo. No lo haremos hoy ni acá. Se sabe ya mucho que habrá que ir recogiendo y ordenando. Organizarnos para saber qué enfrentamos haciéndolo con capacidad y eficiencia, desde alternativas en camino
Con esto dicho sobre la base de la provocación, hacemos dos rondas hoy: las reflexiones de cada colectivo y desde cada sede para compartir lo que pensamos y sabemos al respecto y, una segunda ronda para compartir cómo seguir abordando este tema y esta tarea en adelante. En medio de las dos rondas, una espacio de tiempo para que cada colectivo pueda reflexionar y proponer sus propuestas.
La propuesta es transcribir estos textos, editarlos, lo mismo que los audios, como lo hemos hecho hasta ahora, para que queden a disposición de otros que puedan así participar de este trabajo donde quiera que se encuentren. Se trata de que no se quede entre nosotras y nosotros en un espacio limitado y reducido. Pueblos en Camino no se propone crear un grupo, sino aportar al Tejido de pueblos y procesos en resistencia y autonomía frente al capitalismo. Por eso no tiene dueños lo que acá se dice y se hace. Cada sede tendrá la oportunidad de revisar los borradores y de editarlos, lo mismo que de decidir qué y cuanto de lo transcrito puede y debe hacerse público o no.
“En Colombia no hay desplazamiento porque hay guerra.
En Colombia hay guerra para que haya desplazamiento”
Héctor Hernán Mondragón Báez
PRIMERA RONDA
Empezamos la primera ronda con las y los compas de y desde Suacha:
Desde el DF:
Somos de Soacha. Estamos en el DF en este momento. Queremos darle la palabra a los compas directamente desde Soacha.
Desde Soacha:
Nuestros aportes y reflexiones los hacemos desde la experiencia en un proceso territorial. La estrategia y agresión paramilitar nos ha golpeado. Compartimos las experiencias de algunas organizaciones del municipio. Las estructuras paramilitares azotan el municipio. Es un proyecto y modelo de control social. Se ha agudizado de un tiempo para acá. Existen ahora Macro-estructuras paramilitares más amplias.
Soacha es un municipio aledaño a Bogotá. Somos un millón de personas de diversas partes del país. Soacha creció rápidamente absorbiendo el desplazamiento forzado de pobladores campesinos. Una pequeña Colombia desplazada por el conflicto y la guerra en Colombia. El Paramilitarismo en Soacha, es control social de esta población activamente desplazada por la guerra. Son tres los mecanismos que observamos para esta control.
- “Limpieza” social.
- Ocupación de economías locales.
- Establecimiento de un área geográfica estratégica.
La “limpieza social” es la eliminación sistemática de excedentes o sobrantes de población clasificados como “desechables”. Los que no sirven, los asesinan impunemente los paramilitares. Realizan jornadas de limpieza social con asesinato a jóvenes que están en barrios y actividades diversas.
El control económico, además del micro tráfico, se da en lo que acá se llaman gota a gota. Cobro diario de micro-préstamos. Quien no paga la cuota diaria lo amenazan, los lastiman o matan.
Soacha tiene importancia estratégica: Afluentes de agua para Bogotá y regiones aledañas. Páramo como nacimiento de agua. Al sur de Bogotá en el principal corredor que comunica con el occidente del país. El principal corredor entre la capital y el pacífico para el comercio con Asia y la China que crece de manera dramática. La estrategia paramilitar hace parte del cercamiento a la zona centro de la ciudad capital y su comunicación con el resto del país.
(Hay dificultades con la señal, no se escucha. En este punto el grupo de Soacha desde el DF retoma la palabra y completa la presentación)
Hace 10 años, Soacha era un pueblo con una población de 50 mil habitantes.
hoy somos 650 mil o más, como consecuencia de la guerra. Soacha fue creada a la fuerza y vertiginosamente por la guerra y para los objetivos estratégicos de la misma.
Reiteramos las tres estrategias de fortalecimiento de control territorial paramilitar en Soacha:
- Limpieza social: Crímenes de estado por parte del ejército, la policía y paramilitares: Incluye crímenes selectivos contra jóvenes en pandillas que roban o simplemente contra jóvenes por ser jóvenes y estar en los barrios. Los ejecutan grupos sicariales que matan y torturan. Esto es común en Soacha y en todo el país. Se han ejecutado más de 4500 muertes por cuenta de esta práctica en el centro del país en los últimos años. Una de las formas de trabajo del paramilitarismo que genera el control social creciente consiste en que llegan, matan 2-3 jóvenes de un grupo y luego por terror, reclutan a los demás jóvenes del grupo, quienes se unen dado que, o se hacen paramilitares o los asesinan. Pasan así a ser asesinos y reclutadores de otros jóvenes avanzando en el control territorial.
- Control de economías barriales. Como en el DF (México), préstamos gota a gota. Prestan dinero a pequeños negocios con interés muy alto, que no tienen acceso a dinero y crédito para inversión, negado sistemáticamente desde otras fuentes. Cobran a diario. Tenderos, pequeños mercados. Resultan muertos, sicariados, por no poder pagar.
- Estrategia de control en la periferia de Bogotá. No solamente Soacha. Todo el sector de municipios que rodean Bogotá vienen siendo ocupados y controlados de esta manera por fuerzas de extrema derecha. Todo esto hace parte de una estrategia de toma de la capital a partir de la ocupación: desplazamiento-violencia-dependencia-terror-militarización. Todo el cinturón de poblaciones que rodean Bogotá y muchos barrios al interior de la misma ciudad, sometidas por el mismo mecanismo.
Por Soacha atraviesa la autopista Sur que va hacia la Costa Pacífica. El principal corredor que atraviesa el país hacia el pacífico sale de Soacha. Este control geográfico-estratégico hace parte de este mecanismo paramilitar.
Hay que señalar además, el asesinato de líderes en Soacha, pero no solamente allí. Hay una arremetida en esta dirección en todo el país. Hasta el momento, en este año, se han asesinado 28. (Con anterioridad, en este mismo espacio se presentó el tema de los Falsos Positivos en la palabra y experiencia de las Madres de Soacha.)
Necesitamos dotarnos de un término que nos permita entender lo que pasa. Todo esto que pasa, sus correlatos y múltiples articulaciones, que no es gratuito ni fortuito ni local. El compañero de la JUCO asesinado fue ultimado por gente armada. Es el Estado que elimina (una vez más) un adversario político de manera encubierta, una vez más, para que no tenga costo político para el régimen.
En Soacha, por ejemplo, ocurre lo mismo que lo que ocurrió en San Luis Potosí (México). Soacha se encuentra en la cordillera oriental de Colombia. Se extraen materiales de construcción. De allí que el líder comunitario que defendía el territorio de este proceso extractivista destructivo fue asesinado. Los dueños de estas canteras son paramilitares reinsertados por (Álvaro) Uribe. Se cierran estas minas. Es un ejemplo más entre muchos que son evidencia del proyecto en curso que obedece a la lógica de control vinculado a la explotación (minera etc.) y a la ubicación geográfica estratégica para la acumulación.
Buenas tardes con todas y con todos. Me presento. Soy un reportero independiente adherente a las Sexta Declaración de la Selva Lacandona. Me he dedicado a investigar y a reportar historias de abajo desde hace unos diez años. En particular, quisiera poner énfasis en algo que Michel Foucault llama una precaución de método: se trata de estudiar el poder en y desde su punto capilar, sus extremidades, para reconocer desde éste punto, y construyendo un análisis que asciende , la forma como actúa, como está estructurado y como funciona el poder. Entre muchos, demasiados, puntos capilares del poder podemos estudiar los hechos ocurridos en las calles y alrededores de la ciudad de Iguala, Guerrero durante la noche del 26 al 27 de septiembre del 2014.
Hemos visto cómo el terror tiene la función de desmovilizar, aterrizar, y despojar. Últimamente, creo, también podemos ver cómo el terror toma una función mercantil para acumular por sí mismo, y para producir sujetos susceptibles a esa función de acumulación.
Ayotzinapa septiembre 26-27 de 2014
El objetivo principal del operativo esa noche fueron los estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa que tienen años en la lucha y hacen parte de un proyecto de educación alternativa y en resistencia. Se movieron el 26 de septiembre para conseguir camiones para hacer sus observaciones de clases en escuelas rurales del estado y también para asistir a la movilización del 2 de octubre, en conmemoración de la masacre de Tlatelolco cometida por el Estado mexicano en 1968. Esa noche del 26 de septiembre, a través del sistema de vigilancia C-4, los militares y policías los observaban en sus movimientos, desde tempranas horas, mucho antes de los ataques, sin que hubiera existido justificación clara para que lo hicieran.
Los normalistas no querían entrar a Iguala, pero el conductor de un autobús que pararon los llevó a la central camionera, para, según explicó, dejar el pasaje y después llevarlos a la Normal. En cambio, llegando, él los encerró en el bus y ahí fueron retenidos. Llamaron a sus compañeros que seguían en las afueras de la ciudad esperando buses, y ellos con los dos camiones que tenían acudieron a apoyarlos. Es así como desde la central de autobuses de Iguala partieron cinco camiones (dos que ya tenían y tres que tomaron en la terminal) y en el transcurso de su salida de la ciudad fueron atacados por la policía. Tres camiones se metieron al centro de la ciudad y ahí les dispararon los policías durante un largo trayecto hasta que por fin bloquearon el paso. Varios estudiantes bajaron del camión para quitar la patrulla que la policía usó para frenarlos. En ese momento los policías les dispararon directamente a ellos y cayó un estudiante con un balazo en la cabeza. Ese estudiante, Aldo Gutiérrez Solano, sigue en coma 20 meses después. En esa escena los policías obligan a los estudiantes del tercer camión a bajarse y a acostarse boca abajo en la calle. A varios los golpearon, y después los subieron a las patrullas y se los llevó la policía. Desde entonces están desaparecidos.
EN LA OTRA ESCENA, el otro, cuarto camión: también fue rodeado por policías y se llevaron a los estudiantes. Un quinto camión con catorce estudiantes llegó unos cien metros de donde la policía atacaba al cuarto camión e intentó darse la vuelta. Una patrulla de la policía federal lo paró y bajó al chofer. Los catorce estudiantes bajaron, la policía les apuntaba, pero ellos lograron escapar. En varios momentos de la noche ellos fueron perseguidos, alcanzados por policías quienes les dispararon pero no lograron detenerlos. Dispersándose por el monte y entre las casas de una colonia muy empinada, se escondieron y alcanzaron a escaparse. Otro camión de un equipo de deportistas fue atacado por policías en la carretera de Iguala a Chilpancingo, en un lugar conocido como el crucero de Santa Teresa a unos quince kilómetros de Iguala. Con disparos hirieron a los deportistas y, a pesar de advertirles que eran deportistas, les siguieron disparando. Los policías se percataron de que era un camión que no tenían que atacar ( dice un policía que se acerca al camión: «ya la cagamos comandante, son futbolistas«) y se fueron. Además de varios heridos graves, en ese lugar mataron a tres personas.
En ningún momento ninguna institución del Estado apareció para auxiliar a los estudiantes, ni a los futbolistas. Los estudiantes trataron de resguardar la escena del crimen pero ninguna autoridad llegó a hacer la función de investigar los hechos. En cambio llegaron hombres armados encapuchados y vestidos de civil quienes dispararon y asesinaron a otros dos estudiantes cuando estaban en una rueda de prensa.
En octubre encontraron veintiocho cuerpos semi-quemados en unas fosas en las afueras de Iguala. Unas semanas después los resultados de los análisis de ADN mostraron que los cadáveres hallados en las fosas comunes en la zona, no correspondían a los estudiantes. Entonces cientos de familias de desaparecidos en la zona de Iguala formaron una organización: «Los Otros Desaparecidos» y empezaron a buscar fosas por su cuenta. Encontraron cientos. Los testimonios de muchas familias muestran la participación constante de policías y soldados en las desapariciones. Estos hechos revelan que desde antes ya las fuerzas del estado desaparecían personas con mucha frecuencia.
El Estado mientras tanto inventó un escenario mentiroso con el basurero de Cocula; con testimonios al parecer fabricados bajo tortura. Unos cuatro acusados dijeron que ahí se quemaron los estudiantes. No hay ninguna evidencia física que apoye esa versión.
En estos hechos se combinan varias tácticas de violencia: el asesinato, la desaparición forzada, la mutilación (le quitaron el rostro y los ojos a un estudiante), la persecución, y, a partir de estos hechos se revelan dos cosas muy fuertes: las instituciones estatales de “seguridad” matan y desaparecen, no protegen a nadie y las instituciones estatales de “justicia” encubren e inventan, no investigan ni castigan.
Así está la idea de cómo, empezando con el poder capilar, se puede mostrar cómo se concreta la estrategia del Estado. Existe una cotidianidad del terror. Se ejecuta cotidianamente en diversos procesos en las industrias del secuestro, la extorsión, el tráfico de drogas, etcétera, con participación constante de las diferentes policías y el ejército; todos en torno a hacer dinero de diferentes modos: secuestrando, amenazando, desapareciendo, asesinado, además de las funciones de represión, y despojo…
Así, acumulación, despojo, y terror se combinan y articulan.
Equipo Jurídico de los Pueblos, Óscar Sampayo (vocería):
Las caras del paramilitarismo desde el Magdalena Medio
Iniciar por saludarles desde el Equipo Jurídico Pueblos –EJP- un colectivo interdisciplinar de profesionales que trabajamos en la defensa de los presos políticos y la defensa de la vida, el agua y el territorio en el Nororiente de Colombia, visitamos las cárceles y acompañamos la defensa de los luchadores populares, judicializados y criminalizados por oponerse a la explotación de los recursos naturales como hidrocarburos, carbón, oro, uranio por parte de empresas multinacionales.
En el Magdalena Medio hacen presencia todas las grandes empresas petroleras, extractivas y de operación logística que facilitan la explotación y transporte de estos “comodities”, en la región operan petroleras como oxy, exxon, Shell, mineras como anglo gold Ashanti –aga- y operadores logístico como impala, en su mayoría, estas empresas tienen un prontuario por sus delitos ambientales y por violar reiteradamente los derechos humanos.
Es Barrancabermeja la capital natural del Magdalena Medio, donde han nacido las mayores organizaciones sindicales, campesinas y sociales, esto debido a que es el en Puerto Petrolero donde se inicia desde inicios del siglo XX con la explotación de hidrocarburos y la construcción de la refinería más importante de Colombia, y son los obreros que con sus ideales reivindicativos lograron construir un fuerte tejido social y popular en el bienestar de las comunidades asentadas en esta parte de Colombia.
Es en el Magdalena Medio donde que nace el paramilitarismo en Colombia, allí una mezcla de posturas anti insurgentes, fascistas, narcotraficantes y miembros de la fuerza pública (ejército, policía y el antiguo DAS) establecieron a principios de los 80´s las primeras autodefensas campesinas anti comunistas en Puerto Boyacá a escasos 130 kilómetros de Barrancabermeja, con el propósito de asesinar a los líderes sindicales y sociales y crear terror y destruir las relaciones comunitarias y reivindicativos que se habían construido.
Esta primera ola de terror paramilitar que azota la región dura algo más de 20 años, hasta mediados del 2000, logrando su cometido, masacres, asesinatos selectivos, desplazamientos, torturas sobre el movimiento sindical, campesino y popular, también logran desterrar y acaban con las operaciones de las guerrillas en un parte importante del Magdalena Medio. El paramilitarismo se queda con las rentas ilegales y el Estado colombiano es cómplice tanto por su omisión como por sus acciones en dejar fortalecer estas estructuras criminales que se apoderan del tráfico ilegal de gasolina, durante algo más de 7 años los paramilitares “chuzan” los poliductos y comercializan la gasolina robada, con complicidad de la policía y el ejército, logrando fortalecer sus finanzas e interesados en acaparar otras rentas ilegales, como las del narcotráfico.
En la actualidad, 2016, en el Magdalena Medio hacen presencia dos tipos de paramilitarismo producto de esa génesis de Puerto Boyacá, un paramilitarismo que considera que la lucha contra los comunistas y las insurgencias todavía no ha finalizado y se declaran autodefensas campesinas de tipo contra insurgente; y el otro tipo de paramilitarismo que aún sigue vigente, es el paramilitarismo criminal que nunca se desmovilizó y por el contrario se fortaleció con el narcotráfico, y se convirtieron en empresas criminales muy ligadas a los intereses de las empresas multinacionales extractivas que están explotando el territorio o que están prontas a establecerse, observamos cómo empresas de seguridad de personas con nexos con paramilitarismo brindan sus servicios a empresas como la OXY o que empresas con vínculos con narco paramilitares ganen contratos en el suministro de transporte o alimentación para el personal de estas empresas petroleras antes mencionadas.
El paramilitarismo sigue vigente en el Magdalena Medio y el Nororiente de Colombia y ahora está al servicio del capital y de las empresas extractivas, continua con su apetito criminal de capturar y maximizar las rentas ilegales y son serviles a los intereses del establecimiento cuando se debe asesinar, desplazar, torturar y amenazar.
Paro Nacional el próximo 30 de Mayo
Aprovechando el encuentro, desde el Equipo Jurídico Pueblos, llamamos a la solidaridad a los que compartimos la palabra en este espacio de Pueblos en Camino, a que nos acompañen, visibilicen y estén atentos a denunciar los atropellos del estado colombiano con su aparato represor ESMAD, en el Paro nacional agrario, étnico y popular a realizarse el próximo 30 de mayo, sobre todo el territorio nacional. En la región del Nororiente tendremos varios puntos de concentración donde esperamos movilizar 10.000 campesinos a las carreteras de Santander, Norte de Santander y Cesar para exigirle al estado colombiano una serie de exigencias, una de ellas el establecimiento de la Mesa social por la paz.
Liberación de la Madre Tierra. Norte del Cauca
Somos del proceso de Liberación de la Madre Tierra, al norte del Cauca, en Colombia. Liberamos fincas de la agroindustria cortando caña (monocultivo industrial para producir azúcar y agrocombustibles) y sembrando comida. Desde esta lucha hacemos la reflexión sobre y a partir del paramilitarismo, que es más que el brazo armado de un cuerpo de muchos brazos.
Las y los saludamos desde la resistencia y queremos contarles cómo el movimiento indígena está caminando en el norte del Cauca y cómo nos quieren doblegar desde el asesinato y la masacre que nos aplican cuando enfrentamos el despojo. La denuncia es permanente y no hay respuesta del Estado. La lucha ha sido dura , nos han matado mucha gente. Pretenden hacer un control territorial con su estrategia de masacre y despojo. Utilizan todos los métodos de guerra y terror: leyes, propaganda; los gobiernos se suman a favor de los capitalistas y sus intereses globales.
Hemos sido afectados por el paramilitarismo y una guerra interna en la que la población civil ha sido la que más ha sufrido. No se respeta la vida ni los derechos. En estos últimos años, desde la presidencia de Álvaro Uribe (2002-2010), se intensifican las formas de violencia contra el movimiento social con el pretexto, el señalamiento, de que hacemos parte de la guerrilla, del narcotráfico. Hacen intervención militar-paramilitar. Nos reprimen.
En los momentos más duros no nos quedamos quietos. En tiempos que arreciaba la guerra y se negociaba el “tratado de libre comercio” con Estados Unidos, hicimos la consulta popular, en 2005, empezamos con la acción directa. Ya no esperamos más. La gente, en este territorio, dijo no al tratado. Enseguida, ese mismo año, empezamos la Liberación de la Madre Tierra, que es un tema de defensa, de evitar la explotación de la tierra, de evitar la muerte. Y ante todo lo anterior se nos ha respondido con una brutal represión.
El Estado se ha mostrado a favor de los capitalistas y en contra de los pueblos. Por eso, desde el último gobierno, Colombia se vuelve país minero. Y como el Estado no puede solo, los grupos armados paramilitares sostienen la economía minera e intervienen en otras economías. Por eso los grupos paramilitares se meten al tema ambiental, al tema económico, de derechos (salud, infraestructura). Esos grupos armados y el Estado se declaran en contra de los indígenas (en contra de los pobres en general). Pretenden dividirnos con toda clase de artimañas, por ejemplo, con estrategias religiosas, con estrategias cívico militares, con estrategias institucionales. De modo que unos nos quieren doblegar y otros entretener y confundir.
Dentro de este panorama, haremos referencia a nuestra experiencia y memoria sobre la masacre perpetrada en la región del río Naya. Un hecho atroz. Cien personas masacradas, el 11 de abril de 2001 -muchos de sus cuerpos aún desaparecidos- acusados de guerrilleros, cuando eran compañeros indígenas, campesinos y afros. Un operativo complejo, que involucró fuerzas en el terreno y un aparato de encubrimiento y propaganda que llegó hasta los más altos niveles del poder pasando por los medios de comunicación y las instituciones del Estado. Luego de la masacre sigue sin abrirse una investigación, ni se ubica a los autores intelectuales.
¿Por qué se hace la masacre del Naya? Porque es una zona de más de 90 mil hectáreas de la que quieren desalojar a las comunidades porque ahí hay carbón, uranio, otros minerales, enormes recursos hídricos y forestales y porque, además, está ubicada en el litoral Pacífico de interés para la explotación y comercio transnacional y para la construcción de un puerto de aguas profundas. Allí también tiene intereses la Universidad del Cauca que reclama unas tierras que le cedió, según ellos, el General Santander en el siglo XIX. Pero no han podido desalojarnos porque hemos luchado. Esto que decimos que sucedió en el Naya nos unió con los afros y seguimos en pie de lucha.
En la masacre del Naya se dio coordinación entre fuerzas armadas y paramilitares. Hubo participación directa de la Tercera Brigada del ejército a cargo del Coronel Vargas. Dotaron a los paramilitares. Por ejemplo, les vendieron material de la intendencia avaluado en 120 millones de pesos. Hubo también coordinación con la marina y otras fuerzas.
No ha sido la única masacre, fueron muchas más, además de asesinatos selectivos tanto de militares como de paramilitares o de ambos en coordinación (sin contar las cometidas por fuerzas guerrilleras). La causa siempre ha sido el querer dominar el territorio para inversión estratégica para exterminar la vida.
Con todo esto se nota una conexión del poder político con el poder militar, con el poder económico, con el poder religioso, con el poder judicial, con el poder legislativo, con el poder mediático, con la inteligencia del Estado. No se sabe dónde está el límite entre estos poderes. No se sabe dónde está el límite entre lo “legal” y lo “ilegal”. También un control económico general por parte de las mafias: de la salud, la ganadería y la agroindustria, los juegos de apuestas, el fútbol, la inversión pública, el narcotráfico, la minería… Están unidos y coordinados en sus intereses. Habrá que prepararse a ver cómo seguirán tras sus intereses en el marco del “posconflicto” (acuerdos entre el gobierno y las guerrillas).
Ahora, si no ponemos atención en cómo nos están atacando, y cómo se están movilizando para atacarnos, no podemos resistir. Es necesario afrontar toda esa armazón que combina fuerza militar y paramilitar, doctrina política y asedio institucional. Eso hace que estemos llamados a solidarizarnos y construir otro mundo que por lo pronto no lo alcanzamos a ver, pero que dejamos planteado para la generación que sigue.
Nuestra respuesta es la Liberación de la Madre Tierra. Y en este esfuerzo nos planteamos la restitución de la tierra para los pueblos y para la vida. Con la tierra vienen todos los frutos. Recuperar la tierra para recuperarlo todo, dicen nuestros hermanos y hermanas misak. Y, a pesar de que nos golpean y nos detienen, seguimos en lucha permanente y constante y así impulsamos el ánimo de otros, los afros, por ejemplo, otros pueblos, otros movimientos en sintonía con la palabra de la tierra.
Querétaro:
Queremos aprovechar nuestro tiempo para presentar dos experiencias que estamos intentando mirar y compartir. La primera de ellas será en voz de la propia organización: Grupo Tekei. La segunda de ellas es de segunda mano, para visibilizar y denunciar el asesinato y agresiones a migrantes centroamericanos que pasan por el centro del país, y recientemente, a quienes intentan garantizarles un tránsito digo, como la Estancia del Migrante González y Martínez, ubicada en el municipio de Tequisquiapan.
T´ek´ei, Grupo Interdisciplinario por la Equidad
Buenas tardes a todos y todas. Hago parte de un colectivo que trabaja dando acompañamiento a familiares de personas desaparecidas en el Estado de Querétaro (México). La situación ha sido compleja por el aumento de la desaparición forzada y la trata de personas para múltiples fines: sicariato, explotación sexual, etcétera. Jóvenes entre 13 y 19 años afectados por estos delitos que van en aumento. Tenemos al Estado, que minimiza la problemática, y a partir de ese trabajo, se ha hecho una base de datos de las personas, bajo qué crímenes, qué grupos delictivos los someten y las violaciones a las familias.
Todo este trabajo ha traído como consecuencia una serie de ataques y amenazas a los integrantes del grupo, y tanto lo que denunciamos y observamos como lo que ahora sufrimos, se enmarca en asuntos de violencia y agresión sistemáticas a nivel nacional en México.
Las amenazas que hemos sufrido tienen que ver con actos de intimidación y, justamente, amenaza al colectivo por el trabajo que venimos realizando.
Reforzamos el llamado a seguir dialogando y sobretodo tejer estrategias de cuidado y análisis frente a lo que estamos viviendo para hacer frente a estas situaciones que nos suceden y a parte de las problemáticas que están sucediendo en diferentes acciones.
Estamos ahora mismo amenazadas. Las amenazas en mi contra comenzaron en el 2013, por parte de servidores públicos a nivel estatal. Siguieron amenazas vía telefónica, vigilancia constante, amenaza sexual. Comencé a ser seguida por un hombre hace un año, he tenido ataques en un ministerio público, intento de robo de documentos, de información de feminicidios y un informe no publicado por parte del grupo. El riesgo en que me encuentro es alto. Otros compañeros también se han encontrado amenazados. Esto nos tiene muy preocupados, sobretodo porque se han hecho estrategias desde el estado de difamación y calumnia. Algunas organizaciones se han alejado por ello.
Existe un problema, por ejemplo, con una organización que parece que ha sido capturada-cooptada por el estado y nos ha difamado con las familias de desaparecidos. En estos meses nos hemos dedicado a establecer estrategias de sobrevivencia, más que de trabajo en defensa de las víctimas. A eso nos hemos visto obligados. Hemos tenido que priorizar y afrontar esta situación de riesgo para nosotrxs y dejar de lado en buena medida el trabajo que da sentido a nuestro colectivo. Nos han obligado a pasar de defensores a víctimas como consecuencia de la estrategia de terror aplicada para inmovilizarnos.
Terror contra Migrantes y defensorxs de la Estancia del Migrante González y Martínez:
La problemática consiste en que están siendo asesinados los migrantes, principalmente centroamericanxs que van del sur-norte y pasan por esta región centro. Por aquí pasa La Bestia (nombre que se le da al tren en el que cuelgan migrantes en curso hacia el norte) y hay muchas organizaciones que los apoyan con alimento, servicios de salud, legales, etc. En el municipio de Tequisquiapan, por ejemplo, está la Estancia del migrante González y Martínez, que tiene casi dieciséis años haciendo la labor, y quiénes son los primeros en denunciar las agresiones y asesinatos que comentamos.
Pero ¿Quiénes están asesinando y agrediendo a lxs migrantxs? El Cuerpo de Guardias de Seguridad del Valle de Toluca, perteneciente a CUSAEM, y más recientemente Seicsa, son ejemplos de los agresores, quienes custodian las mercancías de empresas privadas como Ferromex. Estos cuerpos de seguridad, son un modelo específico que actúa como bisagra entre lo público y lo privado, entre lo legal y lo mafioso. Son cuerpos de seguridad, en el caso de Cusaem, que dependen de dependencias públicas de seguridad pero que ofrecen servicios a la iniciativa privada, resultando muy turbio el asunto. Y son cuerpos de seguridad, en diversas ocasiones señalados por su relación con actos ilegales o con el crimen organizado, pero que en el momento de ser detenidos algunos de sus elementos, se les “justifica” diciendo que son “malos elementos”, pero que al no ser detenidos garantizan la impunidad y el tránsito libre de cualquier tipo de mercancías. Cabe señalar que Cusaem custodia infraestructura considerada de importancia para la seguridad nacional en México.
Así mismo, no sólo atacan de manera rutinaria y sistemática a los migrantes, también amenazan a quienes les da respaldo y acogida, como a lxs integrantes de la Estancia González y Martinez, que les da acogida y apoyo. Uno de los integrantes de la Casa del Migrante fue agredido a balazos por el cuerpo de seguridad de seicsa en las últimas semanas.
Vemos con preocupación, que mientras el gobierno reconoce como interlocutores oficiales a ciertas organizaciones defensoras de migrantes, a otras organizaciones como la Estancia las reprime, es como un patrón que estamos viendo que ocurre, reconocer como valido a un interlocutor en algún problema al tiempo que se hostiga y asesina a lxs demás, a los actores que no aceptan sentarse a negociar lo innegociable.
Es una manera de seleccionar aliados y se aislar a quienes resisten al régimen para destruirlos.
Tenemos entonces, a partir de estos problemas presentados:
La existencia de un terror sistemático que involucra al régimen y sus aliados contra migrantes, mujeres, jóvenes, activistas, etc. Y la incapacidad y/o complicidad con ese terror, de parte de instituciones gubernamentales supuestamente defensoras de derechos humanos, e incluso de organizaciones independientes, que ante interminables, burocráticas y agotadoras denuncias sugieren que se paren las acciones que se están haciendo, con la finalidad de cuidar su seguridad. Es un callejón sin salida. Necesitamos comparticiones en el sentido de generar procesos de cuidado comunitario autónomo, y también de cómo ir armando el rompecabezas del terror a partir de los pocos pedazos de información con la que contamos.
Sede Guadalajara:
Primer testimonio:
Hago parte de una cooperativa de trabajo. Para continuar con el tema añadiré algunos elementos a la reflexión de hoy.
La guerra contra los pueblos, primero, tiene una continuidad histórica que podríamos rastrear desde los procesos de colonización e invasión de hace más de 500 años, y tiene nuevas configuraciones en sus estrategias en la fase actual del capitalismo que nos toca padecer. Se aplica a todas las condiciones de la vida social, económica, política, cultural y psicológica; en las dimensiones de la educación, la alimentación, la vivienda, el trabajo, la comunicación, la manera en cómo se organiza la justicia, etc.
Esta guerra de los de arriba se concreta y despliega en los territorios donde se reproduce la vida diaria de los pueblos y barrios, así como en lo más íntimo y profundo de las personas, en lo interno, en lo que podríamos seguir nombrando como los territorios del imaginario.
Las estrategias de guerra que se han venido desplegando parten de un mando único que va más allá de los Estados-nacionales, con Estados Unidos a la punta. Podríamos hablar en este sentido que el Estado, contrario a lo que algunos analistas manifestaban frente al neoliberalismo, donde se habla de la constitución de Estados fallidos o Estados débiles en vías de desaparecer, no sólo no han desaparecido, sino que se han fortalecido en muchas de sus instituciones (represivas, por ejemplo), configurándose como estados transnacionales que operan con rostro legal e ilegal para despojar a los pueblos de su vida y su territorio. La guerra contra el narcotráfico se presenta en nuestro contexto como el pretexto que busca legitimar el escalamiento sin precedentes de la violencia y el terror que se vive diariamente en México. Así como el narcotráfico en nuestro contexto, en otros contextos se construyen desde arriba enemigos bastante difusos, como es el caso del terrorista, para justificar y encubrir esta guerra total.
Lo segundo, estas estrategias contrainsurgentes varían en sus formas e intensidad dependiendo de las regiones, comunidades y movimientos donde se apliquen. De acuerdo a los fines que persiguen, podríamos decir que tienen finalidades disuasivas, persuasivas, de eliminación y hasta preventivas a que surjan nuevos movimientos. El Estado realiza el encubrimiento paramilitar como parte de su estrategia de terror como parte de una guerra más amplia e integral contra los pueblos.
Segundo Testimonio desde Guadalajara:
Estamos en la ciudad de Guadalajara. Nos parece muy importante esta discusión para tratar de reflexionar y entender la maquinaria de guerra y horror. Fragmentar la guerra para el despojo, la explotación, el desprecio.
Sí existe un mando único del terror. Esto lo aseveramos sobre la base de nuestra experiencia, evidencias y memoria. Por ejemplo, en Tijuana se encontró a el pozolero. Recibe este nombre porque en México hay un platillo que se hace a base de maíz y carne y se utiliza éste símbolo para hacer referencia a la desaparición de cuerpos a través de una técnica para su disolución. En este propósito, contrataron agentes del Mossad (Israel). El Pozolero fue entrenado en ésta técnica por agentes de ésta organización.
El mando único del terror sí está en la más intensa fase de coordinación y acción desde la Revolución Mexicana. Tiene como 20 o 30 años que se está intensificando coincidiendo con la masiva concesión de tierras y recursos. Millones están concesionadas a empresas mineras, la privatización del agua, la lucha de las comunidades ha impedido que se lleven su agua. Intentan llevarse agua de las zonas de Jalisco a complejos industriales, mientras avanza el despojo de las costas de todo el país y también enormes proyectos inmobiliarios en ciudad de México. Son inseparables el terror y el despojo.
Tal vez sirva compartir unas cuentas muy generales: Casi tenemos en México 2 millones y medio de policías, eso sin contar lo no contabilizado abiertamente y el crimen organizado. La guerra en México ha causado más de dos millones de muertos, desplazados. Han propiciado con el terror una reorganización del territorial servicio del capital. Por ejemplo, y a nadie debe sorprenderle, cerca de Ayotzinapa hay un proyecto de extracción con una mina a cielo abierto.
La violencia parece estar asociada a la explotación de todas nuestras riquezas y recursos. Las leyes y las reformas aprobadas por este gobierno están ofreciéndoselas a las empresas privadas y se asemeja a lo vivido antes en Colombia y también, en muchos aspectos, al régimen Nazi. Tenemos, por ejemplo, una cárcel en el estado de Coahuila. Allí se hicieron hornos donde quemaban a la gente. Hornos crematorios. Cientos de fosas con cuerpos no identificados por todo el territorio de la República. Junto a esta violencia horrenda, hay una estrategia de represión y espionaje. Se renovó el código militar que permite a los militares detener a personas sin orden judicial previa. Hay leyes pendientes en el senado para configurar el espionaje cibernético. Todo combinado con amplias estrategias de negación, despojo, violencia y guerra del estado mexicano asociado todo al mando único global con una presencia muy fuerte aquí en el país.
Sede Puebla:
Primer Testimonio: Grecia
La experiencia en Grecia es diferente a lo que se ha planteado hasta ahora acá. Una de las características en Grecia es que los neonazis han estado atacando a migrantes, también han atacado ocupaciones anarquistas, con el apoyo y la protección de la policía.
La mano larga del Estado, son los neonazis. En el parlamento de Grecia hay una bancada neo-nazi. También existen conexiones de estos grupos de ultra-derecha con otros ámbitos oficiales del estado con apoyo indirecto de medios de comunicación, a través de un parlamentario Griego.
Vienen haciéndose ataques violentos contra objetivos específicos y sectores de la población y se encubren bajo la apariencia de una pelea entre fanáticos y seguidores de equipos de fútbol para camuflar el fondo de esto que es una agresión fascista. El mayor club de fútbol de Grecia está involucrado en esto. En 2004, por ejemplo, pandillas vinculadas a un club de fútbol Griego se organizaron para actuar contra los inmigrantes. La función de protección de derechos por parte de la Policía, nunca la ejerció ante estas agresiones. La Policía era solamente un observador, o actuó abiertamente agrediendo a las víctimas. En ese sentido, participaron como actores.
Otro problema, es que estos grupos tienen conexiones con el Estado y con medios de comunicación comerciales .
Sabemos que en Grecia la mitad de la policía votó por el partido neonazi. La otra parte son amigos de esos actores.
De otro lado, los grupos antifascistas de Grecia desarrollan una lucha contra estos, pero como los fascistas y la ultra derecha hacen parte de la dominación (mano larga del capital y el Estado), la lucha en su contra no es contra estos solamente, sino que se trata de una lucha contra una forma integral de dominación, no únicamente contra bandas fascistas. La apariencia es que no hay relación ni coordinación. Parecen estar desunidos, separados. Pero en realidad, hacen parte de una integralidad de dominación: el capital y el Estado que apoyan estos grupos.
Frente a la grave crisis de refugiados en Grecia, los nazis quieren organizar marchas contra los inmigrantes y las resistencias antifascistas están para defender esos lugares y gentes. La confrontación y la lucha continúa hasta este mismo instante mientras hablamos.
El ataque a los migrantes es cada vez más fuerte, pero también crece la resistencia antifascista. Por toda Europa crecen los movimientos neofascistas y los grupos de ultraderecha con la misma lógica.
Segundo Testimonio:
Tengo más dudas que certezas: Vamos a seguir problematizando.
Vivimos esta agresión de la contrainsurgencia cada quien a nuestra manera. Lo que se busca es que cada uno genere una opinión individual. Pero si vemos cómo se está viendo y viviendo desde distintas partes del mundo, queda a la vista la relación de ésta estrategia de terror.
Partiendo de lo que cuentan desde Querétaro: ¿Que pasa, por ejemplo, cuando nos alerta la compañera y el compañero sobre la persecución? Nosotros nos quedamos callados. Ignorábamos lo que estaba pasando. A partir de allí tenemos que empezar a reflexionar sobre una estrategia autónoma par hacer frente a la contra insurgencia. Eso implica generar una respuesta desde cada quien, pues ésta estrategia de terror exige respuesta. Ante esta realidad y dinámica, debemos reaccionar y preguntarnos qué hacemos.
Considero que esto se tiene que pensar más allá del paramilitarismo. Este es una sola carta del espectro amplio. Es global y tiene interpelación local, regional y mundial.
Ante esto nos toca leer entre líneas para entender lo que está pasando, lo que se cocina allá arriba y entender la estrategia de terror.
¿Cuándo se comenzó con esta estrategia de Contrainsurgencia? Será limitado pensar, como muchos aseveran, que se inició con Calderón. Lo de Acteal, y otras masacres y establecer, por ejemplo, qué tiene que ver esto con lo que pasó en Ayotzinapa. Data mínimo desde los años 60 (Acteal, Aguas Blancas, hasta Ayotzinapa y mucho más).
Reflexionar en torno a esto nos permite adquirir una visión más completa de lo que se está configurando con la articulación de la ultraderecha y sus grupos clandestinos respecto, por ejemplo a mineras transnacionales, corporaciones como Monsanto y otras, al Estado y a los diferentes grupos violentos.
¿Qué implicaciones tienen en nuestro hacer? ¿Cómo nos inmoviliza e interviene nuestro hacer?
Poner atención al video de Ayotzinapa que muestra la capilaridad del terror. ¿Cómo se articulan en las acciones más violentas? Pero también en la persecución constante, cotidiana.
¿De qué manera, a partir de entender lo que está pasando y ver como se articulan, podemos inhibirlas de manera autónoma, de modo que no tengamos que ir a pedirle a los organizamos cómplices de derechos humanos nos vengan a defender, sino entre nosotros? Frente a esto, necesitamos puntualizar, por ejemplo el cuando se concretizó ésta estrategia que hoy se implementa.
Otro tema es el de los grupos de la ultraderecha, su relación con otros, por ejemplo, el Mossad, Transnacionales como Monsanto y otras, y con otros grupos violentos .
Frente a este mapa cuyos ámbitos y relaciones debemos ir reconstruyendo, preguntarnos cómo nos inmoviliza e inhibe nuestra practica.
Además, claro, poner atención a la relación Estado y todos los grupos represivos, para entender cómo la persecución y demás formas de terror y dominio interactúan y se coordinan (o no).
Tercer Testimonio:
Comparto unas reflexiones y análisis en relación al tema y a Puebla:
Generalmente subyace una relación con la función que se espera del gobierno en Puebla: despojo, contención y legitimidad. Responde a una necesidad de las transnacionales mineras y de fuerzas económicas que requieren del despojo (hidroeléctricas, mineras, petroleras). Necesitan de gobiernos capaces de despojar. Gobiernos, responden a grupos locales y globales para estar en el poder. Es decir, contener el encabronamiento que genera el despojo y mantener la legitimidad ante el resto del mundo y ante su localidad. En otras palabras y necesariamente, se está dando un proceso de gestionar la descomposición social, lo que implica a dos entornos:
- Narco: Está entrando en zonas donde hay algún interés minero y demás extractivismo. Siempre relacionado al estado, transnacionales y organizaciones asentadas en esos lugares. Allí cada cual se lava las manos y niega su relación, generando la imposibilidad de darle nombre al agresor.
- Organizaciones que funcionan como gestores del o ante el Estado, pero cuando se asientan donde éste no llega y hay semillas de insurrección, generan dependencias económicas para su sustento como funcionarios de seguridad, que se sostiene con coerción violenta.
Aquí, en Puebla, en México, no logramos ponerle un nombre a lo que en otros lugares tiene nombres como paramilitarismo, escuadrones de la muerte, etc. Todo está enmascarado.
Las organizaciones que se llamarían paramilitares, se manejan con discursos de izquierda y progresistas. Éstas funcionan diciendo que van a lucha por el pueblo pero favorecen a quienes dominan.
Se usan los canales de corrupción y la necesidad/exigencia del Estado de legalizarse para volver legal todo lo legal (Ley bala, ley Atenco), lo que es una tradición entre nosotros. Con la intención de legalizar la violencia contra la población.
Estos procesos legales e ilegales se fusionan para proteger los proyectos económicos.
Se crea la Gendarmería desde el ámbito Federal, como policía que en apariencia y en el discurso oficial, hace todo de acuerdo a las guías de la ONU; pero por debajo, dependiendo del caciquismo y control a través de violencias profundas. Esto en relación a lo que se puede llamar paramilitarismo en Puebla.
Todo el proceso de despojo legalizado y controlado, a la vez que corrupto y estatizado, es violento y se deriva en violencias, feminicidios, descomposición social de todo tipo. De eso el Estado se aprovecha y lo gestiona, lo matiza, lo castiga puntualmente, lo exhibe para aparentar legitimidad e ilustrar su accionar como legítimo, pero mantiene un clima de miedo profundo que genera la necesidad y la exigencia de un estado fuerte por parte de la población. Incluso la sensación de preferir lo que se establece para mantener un mínimo de posibilidades.
Despojo, contención y legitimidad es lo que surge y genera una serie de acciones políticas y violentas.
Semillitas Zapatistas Argentina:
Nosotras, de Semillitas de Brasil, Argentina y México, reflexionamos sobre el documento enviado. La idea central es lo que ya dijeron los compañeros. Acá hay dos cosas que se complementan:
- La maquinaria de horror, mas allá de sus manifestaciones locales, está centralizada por los capitalistas; los dueños del capital que están coordinados y centralizados. Y frente a esto,
- Nosotros estamos fragmentados.
La centralización de arriba contra la fragmentación de abajo.
Así, la necesidad de estrategias comunes debe ser nuestra principal tarea-
Enfrentamos, por ejemplo, asesinatos por gatillo fácil de la policía pero que opera como «limpieza social», según comentaron ya los compañeros, agresiones de grupos neonazis que atacan a cualquier persona en la calle y también despojo en los territorios del interior del país, el agua en la Patagonia, el tema minero en el norte, etc. y la seguridad del estado sólo apoya a los de arriba. El estado, como en Ayotzinapa, no funciona para los de abajo.
En Brasil se ve como los tentáculos del imperio están minándolo todo, y cómo el poder hace enfrentar pobres contra pobres. Lo cual, aunque va variando y tenga especificidades, sus formas de dominar tienen un hilo conductor, aunque lo llamen paz social o tantos otros eufemismos.
El núcleo central es ¿cómo buscamos estrategias comunes? Esa unión, esa conciencia.
En nuestro país existe lo mismo: En la Patagonia pasa lo mismo. En el Mar del Plata existen neonazis que matan y agreden civiles. Pero como en cualquier caso, el Estado no puede ser juez y parte. Está directamente involucrado.
¿Cómo afecta la cotidianeidad de la vida cotidiana la capilaridad del poder? Lo cual es histórico y va mutando, pero mantiene el hilo conductor del poder, a lo que le llaman paz social.
También tiene formas ideológicas y adquiere formas de gobierno totalmente ceñidas por los intereses de las trasnacionales. En eso vemos un denominador común en México, Brasil y Argentina.
Hugo Blanco Galdos: Perú
En el Perú sufrimos una guerra interna de 20 años (1980-2000) entre el terrorismo de Sendero Luminoso y el terrorismo de Estado (gobiernos de Francisco Belaúnde, Alan García y Alberto Fujimori), fueron asesinados 70 mil peruanos, la mayor parte de ellos campesinos indígenas (además de desaparecidos, presos, desterrados).
Fue la época de mayor aplastamiento del movimiento popular.
Terminó por la reacción del campesinado pobre.
Mucha gente le atribuye el fin de la violencia al dictador Fujimori, a eso se debe la alta votación por su hija Keiko.
Cuando el jefe de Sendero Luminoso, Abimael Guzmán (camarada Gonzalo) fue capturado, declaró el fin de la guerra.
Sede Universidad Andina –Quito, Ecuador:
Estas son algunas de las reflexiones que salieron a partir de la lectura del material.
Amenaza Del Neoliberalismo Violento En Perú
El panorama político en Perú se presenta oscuro a partir de las elecciones de la primera vuelta del 10 de abril de 2016, la candidata Keiko Fujimori, hija y primera dama del dictador Alberto Fujimori amenaza con llegar a la presidencia del país. Esto significará, siguiendo la línea de su padre y los congresistas que la acompañan, una gestión basada en el abuso, autoritarismo, impunidad, control de medios e instituciones públicas.
La injusticia social se agravará aún más, vidas humanas corren peligro. Los proyectos de ley presentados por Keiko Fujimori en su labor de congresista (asambleísta) siempre se han caracterizado por ser represores, el castigo como herramienta de control, nunca propositivos, la mentalidad del fujimorismo siempre ha sido, y en esta campaña electoral no lo han desmentido, la mano dura contra cualquiera que se oponga a su régimen neoliberal y profundamente entreguista.
Además se está movilizando una maquinaria de fraude para asegurar su triunfo.
Recordemos que en las últimas décadas, el gobierno fujimorista ha sido el más corrupto y con mayor incidencia paramilitar como el grupo colina que fueron homenajeados e indultados por el presidente en su momento. No existe fujimorismo sin Sendero Luminoso, es difícil imaginar un gobierno de Keiko sin la figura de un enemigo claro, entonces, o harán renacer a Sendero Luminoso como amenaza de la nación o inventarán otro enemigo, para justificar su arremetida violenta contra el pueblo disidente. El 9 de abril, la noche antes de las elecciones, se registró un atentado de Sendero Luminoso en la sierra central de Perú, es por lo menos, curiosa la pertinencia de este atentado para el discurso performático del fujimorismo.
Segunda Reflexión:
Cuando empezamos a leer el texto sobre paramilitarismo pensábamos que se iba a centrar en la problemática que vive Colombia, avanzando en la reflexión comprendemos que este no es un asunto nacional, sino que se da a nivel mundial y tiene que ver con la dinámica de dominación, exclusión y violencia que genera el sistema en muchos espacios. Se da en cada lugar de maneras particulares, en unos países de forma más intensas y por momentos más álgidos, pero en general obedece a un aparato sistemático que sostiene y legitima un régimen económico y político global.
Uno de los comentarios se da a partir de la lectura del texto y recuerda una entrevista de William Ospina, en donde se comenta que a pesar del dolor que se ha generado en Colombia, que no se ve en otros países, se rescata el valor y valentía que han tenido movimientos y organizaciones sociales para seguir en pie, a pesar de tanta represión que tiene el estado, los gobiernos de turno y las demás instituciones como diferentes brazos del mismos sistema.
Pensábamos entonces que así como se hace agudo el dolor causado, no sólo en un territorio sino a nivel mundial, en muchos pueblos hermanos, así mismo debe ser la resistencia, debe ser la acción de denuncia, de hermandad, así debe actuar. La red de vida que se genera en cada lugar debe tejerse con otras para poder seguir perviviendo, para no aceptar, para generar nuevas acciones, que promuevan otras formas de vida. No siempre la que nos están inculcando ya sea a la fuerza, a través de la violencia, o ya sea culturalmente.
Porque pensamos que el sistema de terror es un brazo violento del sistema, pero no es el único, tiene otras formas de represión y de dominación. Es necesario generar mecanismos de defensa, de denuncia, de acción, en donde la academia se articule con las luchas de los movimientos sociales y los diferentes movimientos sociales entre sí.
Reflexiones En Torno Al Paramilitarismo y las estrategias contrainsurgentes.
El paramilitarismo, en tanto parte de las estrategias contrainsurgentes, es a su vez una de las estrategias de control y disciplinamiento colonial orientadas a mantener la estabilidad del sistema capitalista globalizado. En Grecia, Turquía, Chile, México, Perú o Colombia, la estrategia paramilitar cambia de nombre, de color, de forma pero es la misma manera violenta, asesina, de impedir la transformación radical del sistema moderno-colonial que no puede significar otra sino la creación de Otros mundos posibles. Ya sean grupos Neonazis, Guardias blancas o las Águilas Negras todas tienen la misma función, la misma inclinación por la muerte, el sometimiento, el robo, el desplazamiento y el racismo/sexismo aunque tengan financiaciones, territorios u orígenes distintos. Son instrumentos del poder colonial.
Como parte, entonces, de estrategias tanto globales como locales de dominación, el paramilitarismo es naturalizado y hasta justificado con la ayuda de los medios masivos de desinformación basados en criterios que des-humanizan a quienes luchan desde abajo, con la intención de enaltecer a quienes nos oprimen desde arriba argumentando cosas como: por algo lo mataron; fue su culpa por andar solas o quién los manda a ponerse a protestar; Como si la muerte de la rebeldía junto con l@s rebeldes fuera el sacrificio sagrado que necesita el sistema para lograr su perfección modernizadora.
¿Cómo logramos que los paramilitares abandonen nuestros barrios y montañas, cuando ellos también nacieron allí?
¿Cómo organizarnos para resistir las embestidas paramilitares?
Otra Reflexión:
El material del video de John Gibler me pareció importante cuando él expone los testimonios de los normalistas sobrevivientes en su libro, esas voces se tejen con la verdad y dignidad, exigiendo justicia. Es importante que esas voces no se invisibilicen con la tela del horror de la guerra. La hidra capitalista ha llegado hasta todos los rincones donde las comunidades resisten a ese modelo de muerte, por eso hay que exterminar la cabeza de esta hidra, para no se reproduzcan sus tentáculos.
Reflexión: Entender la estrategia paramilitar
Entender la estrategia paramilitar dentro de la lucha contra la vida desde una perspectiva global nos permite encontrarnos no sólo en la violencia y dolores que continuamos compartiendo sino también en las maneras como hemos hecho frente a estos, encontrándonos para alegrarnos y posibilitándonos maneras de estar de un modo diferente al que el capital nos propone. Para nosotros es importante no sólo centrarnos en los dolores que nos causa este despojo que pretende hacerse de la vida sino por el contrario reivindicar la posibilidad de tener sueños con corazón que nos permitan acechar el sistema que se hace presente en nosotros mismos, cuando desconocemos la hermandad de todo y todos, desde la experiencia buscamos reivindicar las raíces y aprender – enseñar la alegría que se siente cuando accionamos nuestros pensamientos dándonos tiempo y encontrando posibilidades que nos permitan tener más hilos para tejer la vida.
El texto hace una rápida sistematización sobre el modus operandi del paramilitarismo en Latinoamérica, resaltando los asesinatos selectivos, los intereses económicos de las transnacionales que ven en las cordilleras latinoamericanas una oportunidad de desarrollo a costa de los desplazamientos forzados, la sevicia y la desaparición humana la como formas de censura y control social.
Es importante alimentar el análisis del fenómeno del para-militarismo especialmente en el caso Colombiano, ampliando la visión guerrerista – paramilitar que solo victimiza a líderes o Movimientos Sociales y a los jóvenes víctimas de los asesinatos selectivos por su condición de marginación y estigmatización social y pasa por alto la gestión del imaginario paramilitar que a través de la producción de novelas, series y películas, los medios de comunicación invaden los espacios de consumo audiovisual infantil y juvenil, con emotivas individualizaciones y/o reconstrucciones biográficas de jefes paramilitares, narcotraficantes o funcionarios públicos, que ganan lucro sin esfuerzo, con tranzas, traiciones y mediados por diferentes tipos de violencias.
Otra característica de la estrategia de penetración del imaginario paramilitar, es la alianza entre el ejercito, la policía, las instituciones del estado y las instituciones educativas, en un modelo de cárcel a cielo abierto y de normalización del modelo social y económico paramilitar. Este modelo consiste en un control del territorio desde sus estructuras sociales más inmediatas y cotidianas, un ejemplo de esto ocurre en el municipio de Suacha[1], donde las bases militares dentro de los barrios y comunidades, se suma a las actividades sicopedagógicas que el ejercito realiza para reclutar bachilleres o desescolarizados, aun existiendo un fallo de la corte constitucional en contra del reclutamiento en calles y lugares públicos[2]. En Suacha la estrategia de reclutamiento se focaliza en las zonas donde hay presencia de explotación minera, rutas de trafico de drogas y armas o a través de pequeñas bandas de jóvenes que delinquen a nivel local.
La cárcel a cielo abierto trasciende o permea el proyecto de vida del joven, constituyéndose como el recurso humano mas susceptible a ser coaptado por las estructuras paramilitares, por su condición de marginalidad y desfragmentación familiar.
Las políticas publicas de los gobiernos , tal y como se han planteado, en función de la privatización, la rentabilidad de la tierra, la evasión de impuestos de las transnacionales, el remate de las fuentes económicas patrimoniales y el desarraigo cultural, favorecen la influencia paramilitar y la aniquilamiento del tejido social.
La monopolización del dolor dentro de la gestión de la memoria en Colombia ha permitido que los medios de comunicación prioricen la representación de la victima desde la violación de sus derechos humanos y no desde la difusión del empoderamiento para garantizar opciones de no repetición de las condiciones que generaron su victimización.
[1] Nombramos el territorio como Suacha reivindicando su nombre muisca Sua (sol) Cha (dios varón).
[2] http://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-10855625
Colectivo Sin Rostro: Sede Casa de Ondas. México D.F.
(Por problemas técnicos, la mayor parte de la transcripción de estos aportes, lo mismo que la grabación en audio se perdieron y las-los compañeroas no pudieron rescatarlas)
Difícil reconocer a los agresores porque se confunden con otros actores. En Ecatepec, por ejemplo, es posible mirar esa conexión entre grupos económicos, políticos, y diferentes cuerpos de seguridad del estado. Eso daña el tejido social. En ese contexto es necesario tejer solidaridad, organización, porque solos no podemos dar batalla.
Seres de Maíz:
Estuve en México acompañando a ONG de derechos humanos. El modo y la forma es igual en todas las geografías, la mano negra de la hidra: El corazón es la economía, el dinero como símbolo de poder más fuerte que ha creado el humano. De ahí se desprende toda la lógica del capital.
Tres dimensiones;
- Las economías barriales. Opresión del día a día.
- Territorios en disputa, donde están los recursos naturales sometidos al despojo.
- Ataque de la contrainsurgencia. Implantar el terror para beneficio de las empresas.
La principal función de la mano negra de la hidra es el sistema económico.
Propuestas como granos de maíz:
-Protección en la naturaleza,
-Protección en cardúmenes (observar y aprender de la naturaleza)
-Cuidado de la vida entre nosotros.
Edgars Martínez. Antropólogo, Chile-Lucha Mapuche. Desde México D.F.:
Sobre el conflicto mapuche.
Si bien es cierto el denominado “conflicto mapuche” tiene antecedentes históricos de largo alcance, éste se agudizó fuertemente en las últimas tres décadas. Uno de los hitos fundamentales que propiciaron el alzamiento mapuche fue la usurpación del Wallmapu por los terratenientes y el capital transnacional. En este sentido, el marco socio-económico y jurídico-político articulado en la dictadura pinochetista configuró los más férreos pilares que sostendrian el despojo territorial y que haría reventar relación pueblo mapuche – estado neoliberal – capital.
Durante los 90´s surge lo que se conocerá como el “nuevo movimiento mapuche” o “movimiento mapuche autonómico”, el cual recoge la experiencia histórica de lucha y resistencia de su pueblo, que detuvo hace siglos a los incas y, posteriormente, la avanzada de conquista española al sur del continente. En este mismo contexto (durante los 90s) se profundiza la instauración de empresas trasnacionales en la zona centro sur de Chile, la cual se ha sobrepuesto geo-territorialmente y despojado al Wallmapu por medio de la articulación económica de forestales e hidroeléctricas. A su vez, como respuesta concreta, el movimiento mapuche en su conjunto (y con todas sus expresiones) ha iniciado hace bastantes años un proceso de recuperación-productiva del territorio ligada a un proyecto mayor de liberación nacional. Una de las organizaciones que ha formado parte sustancial de este movimiento es la Coordinadora Arauco Malleco-CAM. Tal organización surge durante la segunda mitad de los años 90´s y debido a su claridad política y práctica se ha transformado en uno de los enemigos centrales del Estado chileno. Han sido fuertemente criminalizados por la justicia civil y militar, han sido catalogados como terroristas, han sido encarcelados, pero ahí siguen, firmes en la senda de la liberación nacional mapuche. Es una organización política-mapuche, por tanto, su lógica de funcionamiento dista mucho de otras colectividades de corte meramente clasista, ya que introducen elementos de la cultura e identidad mapuche en su práxis y pensamiento. Su actual vocero, Héctor Llaitul, ha sido severamente criminalizado, llegando a otorgarle condenas irrisorias mediante procesos injustificados, los cuales visitadores internacionales han criticado fuertemente.
En este contexto hay un viraje en la lógica de la criminalización; el enemigo interno del estado deja de ser la guerrilla clásica para representarse, ahora, en el mapuche. En tal proceso, surgen una serie de actores que parecieran secundarios, pero que ocupan un lugar central en la dinámica de este conflicto. ¿se podría hablar de paramilitarismo en Chile? ¿en la democracia ejemplar del continente es posible encontrar expresiones paramilitares? Aunque suene raro e incómodo, claro que si. Tanto se ha expandido la zona de implantación del capital privado productivo y depredador, también se han extendido los grupos que lo cuidan. Los aparatos de blindaje del capital son de carne y hueso, no es pura metáfora. Bandos paramilitares como el Comando Hernán Trizano, actúan en el sur de Chile protegiendo la propiedad de los terratenientes mediante la utilización de armas de alto calibre. Verdaderos grupos bélicos se esconden tras la consigna de “paz en la araucanía” para operar “justificadamente” en contra de las comunidades mapuche integradas por niños, niñas, abuelos, abuelas, peñi, lamgen. Son armas, balas, contra palos y piedras.
Al anterior, podríamos llamarle paramilitarismo informal. A su vez, se evidencia una expresión paramilitar mucho más pública. De hecho, ahí radica su funcionalidad. Los guardias armados de las forestales se han masificado bajo la fundamentación de que tales empresas se encuentran en “la zona roja del conflicto mapuche”. Así se conoce, como cuna de terroristas. Tal justificación sirve para acrecentar la contratación de guardias forestales los cuales, armados, cumplen la función de protección de los parches de pino y eucalipto. No obstante, su función no sólo termina allí. Una parte considerable de las comunidades se emplaza alrededor de plantaciones forestales, lo cual las pone en la primera línea de fuego. Entonces la labor de protección de los guardias se transforma en la labor de amedrentar, amenazar, usurpar, de asesinar a los integrantes de las comunidades que están a su alcance. Un ejemplo concreto de esto son las múltiples agresiones que ha sufrido el peñi Juan Carlos en la comunidad de Cullinco, comuna de Los Álamos, octava región.
En este escenario se hace fundamental develar tales lógicas de funcionamiento que, para el caso chileno, no constituyen focos de opinión pública. El paramilitarismo y las dinámicas bélicas que funcionan con la lógica del capital global no son elementos herméticos, mecánicos ni homogéneos. En cada espacio se reproducen con diversas lógicas, con disímiles ritmos y sobre distintos aparatos. Son dinámicas rápidas y con memoria. Saben actuar, con o sin institucionalidad. La dimensión necropolítica del capital se apoya sobre lo ya construido para funcionar, esto es un gran reto para los movimientos socio-políticos e indígenas. Ahora bien, el movimiento mapuche nos ha enseñado que nosotros también podemos marcar los ritmos de la lucha, sin recetas, pero sí con un irreductible y organizado sentimiento estratégico de lucha en el plano político, cultural y práctico que retome la esencia de nuestra historia rebelde y la convierta en arma.
Marichiweu (10 veces venceremos)
Radio Zapatista:
Una de las cuestiones que nos preguntamos: Habría que enfocarse en las diferencias locales. ¿Qué tan útil es el “mando único”, concederle más capacidad al enemigo de la que verdaderamente tiene. ¿Qué tiene que ver con la articulación de fuerzas?
Pensar en el mando único nos limita en términos del análisis porque no nos permite ver la complejidad y las contradicciones en el arriba. Ver las fracturas de arriba. Si no estamos creando un enemigo único y nos limita y nos ata.
Diferenciar las formas de paramilitarismo y no confundirlo con la estrategia global de contrainsurgencia. Es necesario ver las diferencias. Desmenuzar el mando único y las diferencias locales.
Diferencia entre contrainsurgencia y paramilitarismo. La estrategia de contrainsurgencia contiene al paramilitarismo, es uno de sus componentes.
Compartirles una de las situaciones actuales: región Chol en la zona de Tila. El ayuntamiento iba gestionando un mina de uranio. El paramilitarismo muta entre la policía y el narco. Cómo se va mutando el paramilitarismo con nuevas formas sociales que ahora vemos muy claro con el narco y la policía.
RONDA DOS. PROPUESTAS
PEC; PROVOCACIÓN Y EXPLICACIÓN:
En la propuesta y en el documento que compartimos como insumo, se planteó claramente paramilitarismo no como el tema total, sino como el pre-texto “y sus correlatos” para empezar a nombrar y a reconocer la estrategia de contrainsurgencia.
El mando único: No es una instancia, una cabeza, un centro. Se trata de reconocer la, a todas luces evidente coordinación de la contrainsurgencia sistémica, sistemática y global. Ver la capilaridad en el sentido de visibilizar los tentáculos y las estrategias.
Vulnerabilidad trasnacional localizada donde existen maquinarias de terror.
¿Cómo nos cuidamos? ¿No existe alternativa más que pedirle al verdugo que nos cuide? ¿Cómo le hacemos para cuidarnos? ¿Cómo le seguimos?
En la Jornada-Encuentro anterior se proponen tres caminos:
- Continuar con estos Encuentros-Jornadas tejiendo resistencias-alternativas como inseparables y no dicotómicas.
- Establecer otros mecanismos de comunicación e intercambio. Específicamente se propuso enlazar radios; conectar radios. ¿Cómo estar presentes en los diversos procesos y más allá con emisiones e intercambios radiales? Eso y también, intercambiar materiales desde y entre los procesos por todas las vías incluyendo poner a disposición para esto la página de Pueblos en Camino.
- Invitación a un encuentro en el Cauca como Liberadores y Liberadoras de la Madre Tierra, a mediados del 2015, con nuestros propios medios. Encontrarnos allá, cara a cara, trabajando en Minga, en el corte de caña de monocultivo transnacional y en la siembra de comida y de tejidos entre pueblos.
No hay respuestas ni pretendemos generarlas desde acá sino dejar que surjan de memorias, luchas, tejidos. Recogerlas y defenderlas.
¿Cómo nos reconocemos? Estamos enfrentando una maquinaria enorme, flexible, camaleónica, y no tenemos una capacidad para conocer toda la maquinaria, ni siquiera para nombrarla. Pero no proponemos secuencias que conducen al fracaso. Sabemos desde las luchas que se aprende luchando y que se lucha aprendiendo. Que se habla y se hace. Nos toca ir defendiéndonos y aprender en la práctica, no somos ni queremos vanguardia.
No estamos, entonces, resolviendo el tema sino abordándolo. Este formato de encuentro tiene sus limitaciones. Aunque nos permite encontrarnos, limita el tiempo y nos exige disciplina para preparar, para manejar el tiempo, para reconocer lo precioso de la palabra que cosecha, que es síntesis como fruto y que invita a ser alimento y a generar trueque. Son frutos de diversos climas y savias. Tenemos que irnos volviendo muy sabias y sabios para tejer en estos espacios mientras abrimos otros. Es un desafío compartido, porque este espacio no tiene dueño, como los territorios, pero son nuestros y los defendemos cultivamos y cuidamos para la vida.
Ahora les proponemos pasar a reflexionar cómo seguimos.
Sin que sea una síntesis de lo dicho, porque no se puede ni queremos sintetizar nada, va una propuesta:
- Se planteó claramente que no estamos diciendo que paramilitarismo sea igual a estrategia contrainsurgente en la provocación, sino servirnos del paramilitarismo para provocar justamente precisiones y claridades y para señalar y que se haga evidente que éstas hacen falta.
- Reconocer y desafiarnos a conocer y actuar frente a las manifestaciones de la tendencia a la coordinación de los de arriba, del capitalismo, por necesidad racional y razonable, aún más necesaria y prioritaria en su situación de crisis.
- Luego de escuchar testimonio de muchos lugares, no monolíticamente, pensar y retomar desde la capilaridad de este poder que se nos asoma en lo local y desde donde ascendemos para reconocer sus coordinaciones y nudos: el negocio, el terror, los tentáculos del capital y sus formas, dinámicas, actores, necesidades y objetivos estratégicos.
- Reconocemos en el camino de la lucha y de la resistencia, cómo actúan para saber cómo enfrentarlo tanto en lo local, como desde allí tejiéndonos y de manera cada vez más clara y más eficaz. Es decir, por fin, asumir la guerra total y la resistencia que nos reclama por la vida y la dignidad.
- A pesar de la vulnerabilidad en la que estamos, desde ésta, sin que seamos paranoicos, pero donde unos mas que otros estamos en riesgo. Y también que, sin pedirle al verdugo que nos defienda, siendo estratégicos sin vendernos con este pretexto, preguntarnos cómo seguimos para cuidarnos y protegernos y,
- Sin esperar respuesta, con los elementos de la reflexión que hemos dado, seguir trabajando y articulando mecanismos de intercambio y comunicación, -por ejemplo entre radios-, y que con los materiales que circulemos para conocernos, que la Liberación de la Madre Tierra florezca en todos lados, Chiapas, Guatemala, etc. Buscar encontrarnos en Colombia, en el Cauca indígena-afro-campesino, en Minga, derribando el monocultivo, sembrando comida e intercambiando semillas y frutos para la resistencia y autonomías tejidas y libres
- Ante la necesidad de enfrentar la maquinaria gigantesca que se articula con objetivos estratégicos, saber cómo enfrentar esta maquinaria. Nos toca irnos defendiendo e ir entendiendo. Sabiendo también y desde ya que no somos los que estamos ni estamos los somos porque, falta, pues, lo que falta y quienes faltan, pero lo asumimos.
Luego de 15 minutos de reflexión en cada sede, se abre el espacio para las propuestas.
Propuesta Guadalajara:
Dos comentarios
I. Reconocer la máquina de terror contra las mujeres, visibilizarla. Aunque se nombra, por ejemplo los feminicidios, aún no se reconoce. La esterilización de las mujeres desde Chiapas hasta Perú, la tortura sexual en contra de las mujeres. La magnitud, dimensión de esta maquinaria debe abordarse.
El aspecto de los jóvenes: los agarran y los encierran en centros de rehabilitación que recapturan con ciertas direcciones y nociones de la cultura y religión.
La respuesta posible será con lo que vayamos haciendo. Una nueva visión providencial de la lucha porque tenemos que hacer ya, y no esperar como en la construcción del progreso. Construir organización ahora, no se dará con la fe, porque pensemos en que llegue. Esa rabia debe ser inteligente para organizarnos. Unión no es centralismo ni verticalismo. Apenas falta todo por hacer.
Organizarnos aquí y ahora
II. Cómo debemos organizarnos para enfrentar a la guerra capitalista actual, una guerra que tiene como objetivos principales a los pueblos indígenas, las mujeres y los jóvenes. Cómo detener la represión, el despojo, las desapariciones, los asesinatos, los encarcelamientos y las persecuciones.
Pensamos que la respuesta posible sólo se puede esbozar en lo que ya comencemos a hacer ahora. La vinculación y el apoyo mutuo no se van a ir dando si esperamos a que se den condiciones adecuadas. Porque nunca vamos a crear las condiciones para que existan, nunca llegarán si fijamos la mirada en el futuro. Estamos esperando las condiciones propicias para encontrarnos. En lugar de hacer el encuentro ya entre los que resistimos.
Se está forjando en buena parte del movimiento que se reivindica anticapitalista una nueva fe en el progreso. Hemos caído en una nueva visión providencial de la lucha. Está siendo recurrente el error de creer que los procesos de organización en común, entre los pueblos, barrios y colectivos que resistimos se deben presentar de manera natural. Donde “natural” es el pretexto para no hacer nada, para seguir igual: solas y solos.
Bajo un supuesto miedo a que en las tentativas de encuentro y vinculación se forjen jefes, vanguardias que se asumen con la pretensión de dictar la línea correcta, preferimos quedarnos como estamos. Si no nos atrevemos a construir organización ahora, no la vamos a construir nunca. No se va a dar naturalmente, no llegará porque tenemos fe de que así ocurrirá.
Nuestras energías deben estar, aquí y ahora, orientadas a crear lo necesario para encontrarnos y organizarnos, para disponernos a ver de qué modo podemos solidarizarnos unos con otros de modo efectivo, poniendo el cuerpo, para que se sienta y nos sintamos acompañados, para que nos potenciemos unos a otros en la lucha de cada quién y en la de todos.
El clima que sentimos es de frustración, derrota, desolación, impotencia y por tanto, de rabia, pero como dice el Subcomandante Insurgente Moisés, esa rabia debe ser inteligente, para que nos dispongamos ya, sin esperar nada ni a nadie organizarnos entre nosotros.
Crear espacios de discusión; encontrarnos cara a cara para plantear cómo le estamos haciendo en nuestra resistencia y qué es lo que estamos dejando de hacer.
Tenemos que caer en cuenta que unión no es centralismo ni verticalismo, que descentralizadamente y federados podemos estar juntos para resistir y para crear otro mundo, además de que la lucha que tenemos que dar y el alcance de nuestras tentativas de organización es necesario que sean mundiales, cada esfuerzo que damos tiene una implicación global, es ya global, también, debe serlo nuestra organización y solidaridad.
Sin Rostro, Casa de Ondas. D.F.
Generar esfuerzos concretos frente a situaciones como los que está viviendo la compañera de Querétaro. Construir lazos de respuesta coordinada sobre una situación de emergencia o de alerta. Aprender a activar ciertas estrategias de visibilización para que la respuesta tenga mayor impacto y focalizado.
Equipo Jurídico de los Pueblos:
Se ha convocado a un Paro Nacional en Colombia el 30 de mayo de 2016, desde diferentes sectores populares frente a la arremetida que están sufriendo. Les invitamos a sumarse, acompañarlo y apoyarlo. La lucha es para denunciar y detener la arremetida de terror en curso.
Una propuesta de comunicación. Grabamos un programa de radio (Trochando sin fronteras). También compartimos con Colombia Informa. Proponemos coordinar y compartir estos contenidos e informarnos entre todas y todos.
Suacha:
Lo importante es el llamado a ampliar este tipo de estrategias, por ejemplo, desenmascarar y denunciar términos como la limpieza social, que no es ni lo uno ni lo otro, sino la implementación repugnante del genocidio.
Des-escalar las mentiras que ha estado armando el Estado. Ligado a los falsos positivos, la estrategia perversa que utilizaron como parte de limpiar el terror y maquillarlo fue la de posicionar cierto lenguaje para apropiarse de ellos. Esto hay que derrotarlo, llamando las cosas por su nombre, por el que les damos desde la rabia, el dolor y la rebeldía.
Fortalecer las economías populares específicamente en los barrios.
Ir tejiendo la solidaridad concretamente, efectivamente, paso a paso.
John Gibler:
Si vamos a encontrarnos las y los liberadores de la Madre Tierra en el Cauca, pues vernos regionalmente en torno a la visita en el Cauca. Hacer Encuentros regionales y prepararnos para el Cauca.
Puebla:
Primera voz, desde las calles:
Que no se convierta lo que hagamos en una guerra de mártires.
Nuestra preocupación por la compañera de Querétaro, debe convertirse en acompañamiento, en tareas, en presencia. Hay que inventarse estas cosas. Aprender cuidándonos
Conocer la preparación de los militares y actuar en consecuencia.
Segunda voz:
El Capitalismo es guerra contra los pueblos: ¿cómo lo entendemos y cómo lo trabajamos?
Estructuras institucionales para la defensa de derechos humanos en su carácter son el sistema, estamos en desacuerdo con su prudencia y su lógica que empieza por servirle al sistema.
Hay una tendencia manifiesta a tenerle más miedo a nombrar el fascismo que a sus actos. Basta de eso. Hay que asumir la agresión fascista, transnacional, totalizante coordinada y resistir.
¿Cómo cuidarnos más allá de la denuncia? Recojamos todas las propuestas y notas para irlas trabajando.
Liberación de la Madre Tierra, Cauca: propuestas
Hay que seguir adelante en las luchas. En lo que nos comprometemos es en continuar liberando la Madre Tierra y en ir sumando más fuerzas y más luchas.
En esa línea, como hemos dicho antes, vamos a convocar y organizar un encuentro en el norte del Cauca y vamos a sumar fuerza y gente para convocar y organizar; tenemos que juntarnos para defender la Madre Tierra.
Para profundizar sobre temas neurálgicos vamos a organizar espacios de formación para la reflexión y la acción política conjunta.
Proponemos que estas jornadas virtuales las hagamos cada mes.
Radio Zapatista:
Seguir profundizando sobre la manera específica de implementación y experiencia del terror y de la contra insurgencia en cada ámbito y desde allí, compartir, intercambiar y aprender cómo se da en otros territorios.
Semillitas Zapatistas: Argentina
Habría que buscar un mecanismo que nos conecte a todos en caso de riesgo, para que se prenda una alerta roja para que todos podamos tener una acción concreta.
Nosotros no podemos dar el lujo de desperdiciar nada en este contexto de agresión. Los organismos y organizaciones de derechos humanos, incluso estos, hay que saberlos utilizar y no descartarlos. Que le sirvan a la protección y cuidado.
Se desparramó en todo el mundo. Necesitamos un mecanismo para que suceda algo inmediatamente frente a una amenaza.
Edgars Martínez; Chile
Retomar el concepto de cuidado.
Protección …no perder la esperanza y seguir juntos en la lucha
PEC:
Sigue sistematizar en un documento de esta Jornada-Encuentro, que se articule con lo anterior escrito y documentado. Que los colectivos revisen (y hagan) su escrito con sus preguntas y propuestas de cómo seguir. Retomar lo del cuidado y protección entre nosotrxs, y todo esto documentado compartirlo con los que no pudieron estar hoy acá y más allá.
Estos espacios no permiten decir muchas cosas. Pero retomar lo que hayamos escrito y lo que todxs han dicho para que, tomándolo en cuenta, potenciemos lo que estamos reflexionando.
Puebla:
Crear una lista de correos segura para intercambiar entre nosotrxs. Pero hace falta que cada sede se articule al servidor seguro. En el documento pasamos el mecanismo para concretar la red segura por correo.
También están los muchos radios que habrá que tejer.
Y bueno, a pesar de tantas dificultades, dimos cuenta de la situación de terror, lo que estamos viviendo, pero también es importante sabernos que falta mucho para tener resistencia. Una mínima, suficiente, decidida, necesaria resistencia de y desde los pueblos. Pero no es malo saber que nos hace falta. Lo malo es aún no habernos decidido a estar donde estamos y a enfrentar lo que nos ataca y amenaza. Es necesario y debemos hacer lo que falta.
Esperemos que nos veamos en 15 días y a preparar los encuentros regionales sin financiamiento institucional. Agenda:
- Avanzar en el análisis y difusión sobre nuevos rostros del paramilitarismo y sus correlatos y
- Pensamiento y acción estratégicos: avanzar tejidos de solidaridad.
Querétaro:
abrimos aquí la puerta.
Quito:
Estamos reunidos compañeroas de varios lugares y procesos. Hemos ido reflexionando sobre qué hacer frente a la situación de arremetida paramilitar y estrategias contrainsurgentes que se dan a nivel mundial, y que están arremetiendo contra organizaciones, movimientos sociales, personas de muchos pueblos y demás seres, incluyendo la naturaleza. Ante esto proponemos:
- Capacitarnos sobre plataformas de video activismo a través de las cuales denunciar las historias poco visibles y particulares de los territorios y donde se articulen defensores de derechos humanos que puedan accionar jurídicamente a nivel transnacional.
- Es necesario socializar en diferentes escenarios las razones de defensa, a partir de los principios de los pueblos que han sido planteados desde nuestros ancestros.
- Tener presentes las experiencias que se han vivido a partir de instrumentos jurídicos (derechos de petición, tutelas, denuncias) generando una congestión del sistema judicial que visibilice los hechos fuera de los países y que las voces populares sean escuchadas.
- Es necesario darle rostro e historia a la victimas para que no se naturalice la victimización.
- Existe un imaginario militar en las sociedades al cual debemos hacerle contra, desde el arte, la educación, la comunicación alternativa y el empoderamiento comunitario.
Particularmente para el caso chileno, se debería comenzar por mediatizar las expresiones del paramilitarismo en el territorio. Sobre todo en relación al conflicto mapuche. Una nota en la cual nos relaten los mismos peñi (hermanos) y lagmen (hermanas) como han vivido la articulación de estos grupos en sus comunidades, podría ser una opción. Quizá un video es más didáctico.
En segunda instancia, sería bueno que en el documento final quedaran estipuladas las diversas formas particulares de cómo se materializan tales dinámicas en espacios específicos. Esto puede dar pie a sacar un documento con imágenes y otros recursos para su difusión.
Por consiguiente, es muy importante avalar las propuestas tejidas en la jornada anterior y darle vida a las mismas (Jornadas-encuentros temáticos, Radio y Comunicación y Encuentro de Liberadores y liberadoras).
Ir pensando en la articulación de medios libres a nivel latinoamericano (quizá en esto se tenga más avance) que nos permitan la socialización de las discusiones de este espacio. Ir viendo cómo le hacemos para llegar al Cauca, desde ya, juntarnos e ir armando el camino con diversas actividades.
Transcripción durante el Encuentro-Jornada realizada por parte de integrantes de algunos procesos, editada y luego compartida para revisión, corrección y complementación con las sedes y participantes. En consecuencia, no se trata de una transcripción literal sino de una transcripción y reescritura de los planteamientos e ideas fundamentales. Al revisar y editar la transcripción se busca fortalecer lo expresado en la perspectiva de que sea un instrumento más útil para su difusión, lectura y debate en otros ámbitos. Se comparte antes de publicarlas con quienes participaron para hacer correcciones de fondo. La mayoría de las sedes corrigieron o reenviaron sus textos. Una vez hecho esto, mientras más se disemine y más se discuta, mejor. No tienen dueño, son de los Pueblos en Camino de tejer autonomías y resistencias.
Pueblos en Camino
2016-05-27