Haití en Rebeldía desde ayer: Obligan al gobierno a retractar medidas del FMI y siguen en las calles
El Fondo Monetario Internacional ordenó el aumento de los precios del combustible para seguir aplastando a un pueblo empobrecido y tirado a la miseria por la colonización del capital transnacional…y Estalló Haití de nuevo ayer! Una vez más, la dignidad en medio de la miseria se hace sentir. Se suman muchos abusos y humillaciones a la ya establecida y repugnante permanente conquista y venganza de las potencias y poderes globales contra un pueblo que se atrevió a liberarse del yugo esclavizante y una y otra vez, aunque lo desprecien y ocupen y exploten, se levanta, digno, negro, valiente. Les queda la vida y la arriesgan. Por lo menos tres personas fueron asesinadas, según lo relataba a Resumen Latinoamericano el dirigente Henri Boisrolin, y según informaba Prensa Latina. A las 1500 horas, el gobierno de Haití, ante la movilización popular, suspendía el aumento de precios de combustibles, mientras las calles permanecían bloqueadas y la población movilizada. De nuevo ganaron los nadie, los ningunos, la gente producida como olvido. Tiembla el gobierno ilegítimo e impuesto. Saben ellos que son un régimen arrodillado al capital y sus intereses y que nada cambia en Haití hasta cuando todo cambie y sean por fin libres como lo merecen.
Libres cuando la solidaridad activa y actuando de los pueblos de Abya Yala y el mundo los respalde y se sume a esa lucha, al logro de esa libertad. «Silenciando el Pasado«, para negar presente y futuro, resume la historia de ese pueblo y de su rebeldía el excepcional historiador Haitiano Michel-Rolph Trouillot. Pero el pasado allí no hace silencio y por eso mismo, la otra historia negada actualiza la memoria de los horrores y de la rebeldía y negro es el color de la lucha, negro negando el señalamiento y la imposición. Negro como la «Crítica de La Razón Negra» de Aquiles Mbembe que ayer, de nuevo, salió de la penumbra para decir basta y poner el cuerpo hambriento pero íntegro:
«Para construir un mundo que compartimos, debemos restaurar la humanidad robada a aquellos que han sido sometidos históricamente a procesos de abstracción y cosificación. Desde esta perspectiva, el concepto de reparación no es solamente un proyecto económico sino un proceso de re-ensamblar miembros y partes amputadas, reparar vínculos rotos, relanzar las formas de reciprocidad sin las cuales no puede haber vida ni sentido para toda la humanidad«. Eso, no sólo detener el aumento de los precios de gasolina, eso es lo que salió de nuevo a las calles en Haití. Eso, y solamente cuando se alcance eso, habitaremos un solo planeta, tejidos en la diversidad como pueblos en la Madre Tierra. Pero antes y ahora, la rebeldía y la lucha desde quienes fueron señalados como negros, estalla y recoge el camino que está tan lejos de deshacerse del abuso y alcanzar su reparación, como el tamaño de la fuerza de su entrega que jamás cesa a pesar del fango y la miseria. Anoche, el Presidente pidió calma y que la gente regresara a sus casas, pero hoy reportan que esa orden fue desobedecida. Un gobierno que obedece al FMI, no tiene autoridad para mandar al pueblo al que somete a las políticas de despojo. ¡Así Sí! Resistencias y Caminos. Pueblos en Camino.
Haití: 3 muertos en protestas
contra precios de combustibles
Tres personas fueron asesinadas el viernes durante manifestaciones contra la decisión del gobierno de Haití de aumentar los precios de los combustibles.
Periodistas vieron los cadáveres de dos manifestantes que fueron baleados en la zona de Delmas, en Puerto Príncipe, durante enfrentamientos con la policía. No estaba claro quién disparó contra el hombre.
El tercer deceso fue de un guardia de seguridad de un ex candidato político que fue detenido en una barricada. El guardia salió de su vehículo y disparó al aire al parecer para tratar de dispersar a la multitud. Un periodista de The Associated Press vio a la multitud capturar al hombre mientras huía de las balas, golpearlo y prender su cuerpo mientras el vehículo se iba.
Los manifestantes habían prendido neumáticos y montado barricadas para bloquear las principales calles de Puerto Príncipe y de la ciudad norteña de Cabo Haitiano.
Informe de urgencia de nuestro corresponsal Henry Boisrolin:
Compañerxs: les cuento en apretada síntesis que la situación en Haití sigue en estado de ebullición y que se ha profundizado la crisis de manera muy grave. Hace días se vive un estado insurreccional en casi todas las regiones del país. Las rutas están cortadas, hay incendios, barricadas y enfrentamientos violentos en diferentes lugares. Esta situación es resultado de una acumulación de conflictos, descontentos y enfrentamientos de toda clase que están desarrollándose desde hace años, frente a las políticas antipopulares y de saqueo que lleva adelante el gobierno títere del actual presidente ilegítimo Jovenel Moïse.
El último detonante ha sido el anuncio del Gobierno de un aumento brutal en el precio de los combustibles. (Es necesario aclarar que los principales combustibles utilizados por el pueblo para cocinar, son el carbón y el kerosene, porque no existe suministro de gas, salvo para las clases acomodadas y la élite dominante). Este aumento había sido anunciado previamente, y las organizaciones populares habían advertido que si lo cumplían, iba a desatarse una insurrección popular. Es lo que está sucediendo ahora.
El estado insurreccional actual ha sobrepasado las posibilidades de contención por parte de las fuerzas represivas. La magnitud del estallido es monumental, ni en la caída de la dictadura de Duvallier se había registrado un levantamiento de estas características.
La Policía Nacional está acuartelada y lo ha informado a través de un comunicado. Esta decisión «rara» indica que el presidente Jovenel no tiene el control sobre su principal fuerza de represión. Tampoco hay presencia de la Policía de la MINUJUSTH (ONU) en las calles. Hasta ahora el Gobierno no ha emitido declaración oficial alguna.
El elemento fundamental a comprender es que el estado de sublevación de las masas trasciende por completo el hecho del aumento de los combustibles. Esto ha sido “la última gota que rebalsó el vaso”, como solemos decir. El hartazgo y clamor popular expresado en las barricadas y en las calles exige la renuncia del Presidente, reclama la caída del Gobierno.
Cientos de miles de manifestantes se desplazan por las calles, levantando barricadas, incendiando estaciones de servicio, concesionarias de autos, locales, viviendas, etc. y se está convocando a ocupar el centro de la capital, donde se encuentra el Palacio de Gobierno.
No hay medios de transporte, todos los mercados están cerrados, los medios de comunicación (radios, canales, etc) no están emitiendo información porque los periodistas no consiguen trasladarse hasta sus centros de producción, aunque en algunos casos la omisión de información es intencional. Sin embargo, comunicadores de medios populares están intentando recomponer de alguna manera la cadena de información.
Es importante destacar que por el momento, ninguna fuerza política está comandando las acciones, si no que se están desarrollando en forma descoordinada. Las organizaciones están intentando articularse para dotar a este levantamiento de una dirección política más clara y evitar que la situación termine en una violencia generalizada sin control.
Henry Boisrolin
Resumen Latinoamericano
Julio 8 de 2018
http://www.resumenlatinoamericano.org/2018/07/07/haiti-3-muertos-en-protestas-contra-precios-de-combustibles/