La borrachera electoral (Mensaje de año nuevo): Actualizado
Como mensaje de año nuevo, Hugo ha actualizado y modificado este texto. Compartimos esta versión más reciente y mucho más firme dentro de la posición planteada. «En este año electoral, es imprescindible decir mi posición frente a las elecciones. El título, el inicio y una parte de este artículo, son repetición de un anterior escrito mío. Sin embargo, debido a acontecimientos posteriores, la conclusión es diferente: No hay candidatura anti-sistema.» Dice Hugo esto para el Perú, pero seguramente lo único que cambia en el mundo entero regido bajo el marco de las borracheras político-electorales al servicio del sistema es la periodicidad de las elecciones. Lo demás, sobre todo el impacto destructivo y apabullante sobre las luchas populares de las campañas y los partidos, es lo mismo. Agregaríamos que nada pone en evidencia la degradación colectiva y los efectos de la manipulación y la obediencia como este recurrente caer en la borrachera a pesar de saber que esto es así, que de nada sirve a los pueblos, que es destructivo y beneficia a los mismos y que nos desmantela los procesos y caminos arduamente construidos. Pero ahí seguimos. Hugo Blanco escribió esta carta ejemplar, este testimonio, esta lección de dignidad y sabiduría respaldada por su larga vida de coherencia, aún en el camino de cometer y reconocer sus propios errores, como una carta privada y crítica al Frente Amplio, que articula, o pretende articular a las izquierdas para el proceso electoral que se inicia en el Perú. Un Perú que, al igual que el resto del continente, por la vía electoral, se queda sin opciones y por ello debe optar entre sin salidas. Resume Hugo la situación así:
“El próximo gobierno será uno de los corruptos conocidos: Fujimori (si gana Keiko saldrá de la prisión al palacio de gobierno), Alan García, (quien, entre muchas otras cosas, masacró al pueblo en Bagua y otros lugares y dio libertad a narcotraficantes que pagaron millones). Kuczinski (norteamericano yerno de un jefe de la CIA, organismo yanqui encargado de buscar y matar luchadores antimperialistas). Toledo (que inexplicablemente se hizo de millones durante su gobierno). Y otros por el estilo.” ¿Cómo Así? Pueblos en Camino
En este contexto, por el afán de ganar curules y cargos, este “Frente Amplio” no sólo cae en manos de maniobras y manipulaciones que llevan a líderes de determinados grupos a candidaturas y cargos de dirigencia sino que, peor aún, la agenda, como la de Podemos y Syriza en Europa o la de los gobiernos progresistas y las “izquierdas” en el resto de América Latina, deja de ser anti-sistémica para conseguir votos. En otras palabras y con este programa electoral que nada cambia a nombre de cambiarlo todo, si la gente en el Perú elige a la izquierda del Frente Amplio, es evidente desde ahora, que el extractivismo, el despojo, la entrega a la corrupción, a la represión, al capital transnacional, se van a consolidar (Ollanta revisitado). En contraste Hugo esboza, a partir de luchas y resistencias concretas y en curso, en unos puntos básicos, mínimos, lo que haría que la agenda electoral fuera realmente de izquierda y anti-sistémica. Es una lección de dignidad y claridad, a la vez que un referente frente al cual queda claro que ni en el Perú, ni en el resto del continente hay partidos o gobiernos de izquierda anti-sistémica. No es un texto pesimista ni desolador, aunque las circunstancias y la borrachera y sus efectos predecibles lo sean. Al contrario, nos plantea con tal claridad la diferencia entre las luchas desde abajo realmente anti-sistémicas en contraste con este repugnante proceso electoral que, de nuevo y desde el Perú va quedando cada vez más claro para la resistencia y las autonomías, quienes somos nosotras y nosotros y quienes son ellos y el sistema. Quienes hasta hace poco aseveraban con el mismo discurso que la lucha armada era el único camino transformador, hoy aseveran que en la borrachera electoral está la única salida posible: embriagados nos obligan a confundir medios y fines para obedecer a sus vanidades e intereses y que gane el sistema que conservan y protegen. ¿Cómo Así? Pueblos en Camino
La borrachera electoral
(Mensaje de año nuevo)
En este año electoral, es imprescindible decir mi posición frente a las elecciones. El título, el inicio y una parte de este artículo, son repetición de un anterior escrito mío. Sin embargo, debido a acontecimientos posteriores, la conclusión es diferente: No hay candidatura anti-sistema.
Cada 5 años el sistema capitalista que nos oprime, nos aparta de nuestra lucha defensiva para que supuestamente elijamos a quienes nos van a gobernar.
Esto naturalmente que es falso. Quienes gobiernan el mundo son la grandes compañías transnacionales a través de sus sirvientes: Presidentes, mayorías parlamentarias, Poder judicial, Ministerio Público (fiscales), Policía, Fuerzas Armadas, grandes medios de comunicación, etc.
Jamás van a permitir suavemente que el pueblo les arrebate el poder.
A veces, cuando el pueblo se rebela contra los opresores, éstos permiten que entren gobiernos llamados “progresistas” (Venezuela, Bolivia, Ecuador, Brasil, Argentina), que recortan privilegios de las grandes empresas gobernantes, pero garantizan la continuación del sistema. Luego de un tiempo, como no se puede hacer una revolución a medias, estos gobiernos se desprestigian y vuelve a gobernar la derecha, sirviente leal del gran capital. Esto lo estamos viendo en Venezuela y Argentina.
En el Perú todavía estamos muy lejos de sacudimientos populares como los que hubo en Venezuela, Bolivia, Ecuador. Por lo tanto, las empresas transnacionales no se ven obligadas a aceptar un gobierno “progresista”.
Las encuestas muestran que el pueblo no confía en el gobierno, ni en el parlamento, ni en jueces, ni fiscales.
También muestran que la mayoría no sabe por quién votar.
El próximo gobierno será uno de los corruptos conocidos: Alberto Fujimori (si gana Keiko saldrá de la prisión al palacio de gobierno), Alan García, (quien, entre muchas otras cosas, masacró al pueblo en Bagua y otros lugares y dio libertad a narcotraficantes que pagaron millones). Kuczinski (norteamericano, yerno de un jefe de la CIA, organismo yanqui encargado de buscar y matar luchadores antimperialistas). Toledo (que inexplicablemente se hizo de millones durante su gobierno). Acuña, conocido corrupto, y otros por el estilo.
Los “izquierdistas” en busca de candidaturas, tratan de entrar a cualquier lista que los recoja. Mercedes Cabanillas está en la lista del actual gobierno sirviente de las transnacionales. Rosa Mavila va en la lista del empresario Nano Guerra García y dice que lo hace porque está ahí Yehude Simon, uno de los que dirigió la masacre de indígenas amazónicos en Bagua.
Los “izquierdistas” a quienes ninguna otra lista quiso recibir, fueron recogidos por el Frente Amplio. Así, este Frente, nacido por la actividad anti-minera de Marco Arana deja de ser la candidatura anti-sistema que parecía, pues se somete a las exigencias de sus nuevos aliados que no desean eso.
Esta política acomodaticia del Frente Amplio está garantizada por la ausencia de democracia interna, todo lo decide la omnipotente Comisión Permanente, que es la que pacta con los nuevos aliados.
Hace poco hubo un congreso al que asistí como invitado. Constaté que lo único que decidió dicho congreso, fue que el candidato a la primera vicepresidencia sea Marco Arana.
El programa y la elección de candidatos, que debían haber sido discutidos por el congreso, son decididos por los pocos miembros de la todopoderosa “Comisión Permanente”.
La candidata del F.A. que decía que los periódicos no publicaban sus declaraciones, ahora, gracias a sus nuevos aliados, cuenta con el diario de uno de ellos.
Le indigna que le digan “anti-minera” y cuando “La República” le pide que señale un caso de minería que conviva con el medio ambiente dice “debe haber alguno, yo no lo he visto”. Probablemente daría la misma respuesta si le preguntaran si hay un asesino que no mate.
Todos los candidatos garantizan la continuidad del sistema neocolonial subordinado al gran capital transnacional
La fundamental tarea de la campaña debe ser la educación del pueblo.
En primer lugar, una opción anti-sistema tiene el deber de señalar claramente que éste no será derrotado por la vía electoral, que la vía para desplazarlo es la lucha social.
Eso no es contradictorio con la participación electoral, señalo el ejemplo de cuando fui candidato a la Asamblea Constituyente: Usé el espacio gratuito que teníamos los candidatos para hacer propaganda electoral, para todo lo contrario, para señalar que la vía para responder al ataque que hizo el gobierno de Morales a la economía popular, debía ser respondido por el esfuerzo para que el paro convocado por la Confederación General de Trabajadores de Perú (CGTP) fuera exitoso. Que votaran por cualquiera, pero la unidad debía darse en el terreno de la lucha. Como muestra de que ese llamado indignaba al sistema, a las pocas horas estuve preso y fui enviado con otros opositores al gobierno, a un cuartel antisubversivo de Argentina para que nos liquidaran (si eso no se realizó fue gracias a que un periodista publicó la foto del avión militar peruano en una base antisubversiva argentina).
Precisamente fue mi posición anti-electorera la que logró que fuese el izquierdista más votado, estando yo en el exilio.
¿Cómo es la economía actual?
La economía peruana está orientada al servicio de las grandes empresas transnacionales. Lo único que les interesa a ellas es cómo ganar más dinero en el menor tiempo posible. No les importa si para eso deben atacar fuertemente a la naturaleza y a la población peruana. Mencionemos los principales ataques:
– La minería a cielo abierto, que consiste en explosionar toneladas de roca o de suelos y bañarlos con cianuro, mercurio u otras sustancias químicas nocivas, usando mucha agua, que ya no puede ser usada para el uso directo, para la agricultura o la ganadería. Por eso está prohibida en Costa Rica y en varias provincias argentinas.
– La deforestación del pulmón del mundo, la selva amazónica.
– La extracción de petróleo y gas que envenena los ríos amazónicos matando peces y personas.
– El agro-negocio mata el suelo cultivable con el monocultivo y con sustancias químicas: fertilizantes, insecticidas, herbicidas. Además quita el agua de la agricultura familiar que nos alimenta en forma sana, para cultivar espárragos y alcachofas que absorben mucha agua, destinados a la exportación a Europa y Estados Unidos. Por otra parte super-explota a los obreros agrícolas pues ha conseguido que sus sirvientes hacedores de leyes hayan dispuesto la disminución de sus derechos laborales.
¿Cómo debe ser nuestra economía?
El gran tesoro del Perú es su biodiversidad. De las 104 zonas de vida existentes en el mundo, en el Perú hay 84.
Tenemos parte de la selva más grande del mundo. Estamos atravesados por la cordillera andina, la que además de tener diversos climas por sus diferentes alturas, tiene el oriente lluvioso, mientras el occidente no. Para fortuna nuestra, la cordillera no va de este a oeste, sino de norte a sur, lo que hace que 3 mil metros de altura en el norte tenga un clima diferente que 3 mil metros de altura en el sur.
Tenemos un mar privilegiado. Estamos en el trópico de capricornio, pero viene el agua del sur helado por la corriente de Humoldt, lo que hace que además del movimiento horizontal de las aguas haya un movimiento vertical, ya que el agua caliente sube y el agua fría baja. Este movimiento horizontal y vertical de las aguas es propicio a la existencia de abundantes tipos de fitoplankton y zooplankton (vegetales y animales microscópicos) que alimentan a gran diversidad de peces. Desgraciadamente el feroz ataque de las transnacionales pesqueras está acabando con esta riqueza.
Esa biodiversidad terrestre y marina ha favorecido el surgimiento de la diversidad cultural.
La economía peruana debe estar basada en el aprovechamiento de la diversidad biológica y cultural.
Nuestra agricultura trabaja más de 40 especies vegetales alimenticias propias (además de las importadas como el trigo y las habas) con infinidad de variedades cada una (por ejemplo tenemos 3 mil variedades de papa).
La riqueza vegetal no solo produce alimentos, sino también medicinas (la quinina descubierta por los “salvajes” amazónicos hizo que sobreviviera el que llegó a ser “el Rey Sol de Francia”).
En la selva hay plantas que curan el cáncer, anticonceptivos, etc. Naturalmente las transnacionales ocultan estas verdades que les malogran el negocio. Nosotros tenemos que aprender de los conocimientos populares amazónicos, serranos y costeños.
La diversidad de paisajes y de culturas es un paraíso para el turismo ecológico y social.
Esa economía nuestra debe reemplazar a la economía extractivista a la que nos destinan las empresas transnacionales por interés de ellas, contra el interés del pueblo peruano.
Corrupción de los poderes públicos
Otra característica de la situación actual es la escandalosa corrupción de la Policía, del Poder Judicial y del Ministerio Público (fiscales).
Además de corruptas, estas instituciones son usadas para atacar al pueblo que defiende sus derechos.
No tocan a grandes corruptos como Alan García, quien, como mencionamos arriba, dio libertad a muchos narcotraficantes a cambio de fabulosos pagos de dinero.
Asesinan y encarcelan a quienes luchan en defensa del agua, de la vida y contra otros atropellos.
Nuestra respuesta
Eso debemos denunciar en forma clara.
Es estúpido pedir que esas instituciones se arreglen ellas mismas desde adentro, precisamente la función de ellas es ser lo que son. Debemos manifestar claramente la necesidad de erradicarlas.
Impulsar que la autoridad emane del pueblo, como manifestaron los compañeros Wampi de la Amazonía que declararon que tienen su gobierno autónomo que tomará las medidas necesarias para defender su territorio.
Debemos impulsar las rondas campesinas que son organismos surgidos de abajo que resguardan el orden público. En la población urbana hubo incipientes rondas urbanas o comités vecinales, también surgidos de abajo. Son esos organismos populares los que deben sustituir a los corruptos organismos del sistema.
Eso es lo que debiéramos decir en la campaña electoral.
En el Congreso del Frente Amplio hubo ronderos que exigieron que se les tome en cuenta. El Frente Amplio ni los menciona, son candidatos de derecha quienes demagógicamente hablan de ellos.
La candidata del Frente Amplio nos dice que, además de aumentar el sueldo de los policías, desde el interior (super-corrupto) de la dirección policial debe surgir una comisión para combatir su corrupción,
Lo que debemos plantear es que sean las rondas campesinas y rondas urbanas, juntas de vecinos, o como se llamen, quienes se ocupen del orden interno, que sea la propia población quien designe de su seno, a los encargados de esa tarea.
El pueblo peruano sabe y repudia la corrupción de jueces y fiscales. Precisamente debido a ese descontento debemos plantear que los jueces y fiscales sean elegidos por el pueblo y revocados por él.
Conclusión
Si nos responden que alguno de los planteamientos expuestos no está aceptado por la Constitución, contestamos que debemos exigir la convocatoria a una Asamblea Constituyente que reemplace a la actual, impuesta por la dictadura de Fujimori.
Repetimos: Ningún candidato está contra el sistema económico y político actual regido por las grandes empresas transnacionales. Algunos plantean ligeras modificaciones.
Por lo tanto no hay batalla que dar en ese terreno. No nos envolvamos ni perdamos energías y tiempo en la borrachera electoral.
El único campo de batalla que le queda al pueblo oprimido es continuar la lucha colectiva en defensa del agua, de la vida y de sus otras reivindicaciones, como fue la lucha de los jóvenes contra la ley que les recortaba sus derechos laborales. Es notoria la declaración mencionada del pueblo Wampi.
Solo tenemos a esas acciones colectivas para combatir el sistema económico y político dirigido por las grandes empresas transnacionales contra nuestra naturaleza y contra nuestro pueblo.
Nuestra tarea es fortalecer nuestras organizaciones de resistencia y enlazarlas.
Hugo Blanco
1 de enero de 2016