Primer acuerdo entre Gobierno y mujeres del Cauca para erradicar minería ilegal
Las mujeres reclamaron por los daños que la minería ilegal ha dejado en el medio ambiente, la flora, la fauna, y en su propio cuerpo, pues se han visto obligadas a abandonar sus territorios a causa de la violencia.
Tras completar cuatro días de diálogo ininterrumpido con el Gobierno Nacional, un grupo de mujeres afrodescendientes provenientes del Cauca que ocupaba en protesta la sede del Ministerio del Interior, llegó a un primer acuerdo para actuar contra la minería ilegal en esa región.
Según confirmó el Ministerio, acordaron crear una subcomisión para abordar los puntos que conforman la solicitud de acciones inmediatas del Estado frente a la minería ilegal.
Además, se avanzó en el mecanismo para la revisión de los acuerdos pactados en las reuniones del 11 de noviembre de 2013 y 7 de mayo de 2014.
Por su parte, el Gobierno “se comprometió a adelantar acciones con el objetivo de erradicar la minería ilegal en el Cauca, brindando la protección para el retorno a los territorios”.
La comisión encargada de atender las peticiones de las mujeres, estuvo conformada por los viceministros de Minas, María Isabel Ulloa y de Ambiente, Pablo Vieira y funcionarios del Ministerio de Defensa.
Los garantes de esta concertación son el Representante de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Colombia, Todd Howland; la Defensoría del Pueblo, el Padre Francisco de Roux y los senadores Iván Cepeda, Luis Evelis Andrade y Alberto Castilla, entre otros.
El motivo que llevó a estas mujeres a caminar más de 400 kilómetros desde Cauca hasta Bogotá, es el daño que la minería ilegal ha dejado en el medio ambiente, la flora, la fauna, y en su propio cuerpo, pues se han visto obligadas a abandonar sus territorios a causa de la violencia que genera esta actividad.
Tan solo el corregimiento de La Toma, localizado en el municipio de Suárez en Cauca, es el escenario de una disputa por el control de tierras ricas en recursos naturales, incluidos los minerales como el oro.
Mientras tanto, los habitantes afrontan la entrada de maquinaria para la explotación del oro, de la mano de ‘Los Rastrojos’ y ‘Las Águilas Negras’, quienes tienen presencia en la zona y han amenazado a líderes y habitantes de la zona.
Malformaciones en el cuerpo, disminución en la capacidad visual o auditiva, deficiencias en los sentidos y hasta la muerte, son riesgos que se corren con esta actividad minera donde el mercurio y el cianuro, son los principales elementos utilizados para la explotación.
Fuente: El país-Colprensa