Catalina Catrileo, hermana de Matías: “No veo la solución en la vía electoral”
Ad portas de una nueva elección presidencial, donde la ex mandataria Michelle Bachelet vuelve a lanzar una candidatura, conversamos con Catalina, hermana de Matías Catrileo, joven mapuche asesinado el 3 de enero del año 2008 mientras la actual candidata se encontraba en el poder. En las faldas del Cerro Huelén, o Santa Lucía como mejor se le conoce, hablamos sobre la muerte de Matías, la respuesta de las autoridades y la lucha que actualmente sostiene el Pueblo Mapuche.
-La muerte de tu hermano aconteció el 3 de Enero del año 2008, mientras se encontraba Michelle Bachelet como presidenta. ¿Cuál fue la respuesta que en ese entonces entregó la mandataria frente a la muerte de Matías?
-No lo pudieron esconder porque se llamó a la radio y se supo inmediatamente lo que había sucedido. Recuerdo que habló la presidenta y el ministro intentando calmar los ánimos, pero siempre dando un claro respaldo al actuar de carabineros y las instituciones que, según ellos, estaban cumpliendo con su deber.
-¿En qué circunstancias sucedió la muerte de Matías?
-Matías y otros lamien entraron al fundo Santa Margarita que en ese entonces estaba en manos de Jorge Luchsinger. Ellos lo estaban reclamando como territorio ancestral con una ocupación simbólica y se metieron al lugar con lienzos, instrumentos musicales y quemaron unos fardos de paja. Entonces llegaron los carabineros, eran tres uniformados y empezaron a disparar para repeler. Ahí es cuando el cabo Walter Ramírez saca una ametralladora UZI y empieza a disparar horizontalmente, una de las balas impactó por la espalda a Matías, le perforó un pulmón y salió por la parte delantera. Justo estaban cerca de la salida del predio y Luchsinger había hecho una zanja que rodeaba todo su terreno, al momento de saltar Matías no alcanzó a cruzar, cayó al fondo de la zanja y allí murió.
-Tengo entendido que tú le escribiste algunas cartas a la presidenta con respecto a la muerte de tu hermano ¿Qué buscabas expresar en ellas? ¿Qué respuesta querías recibir y cuál obtuviste?
-Principalmente exigíamos que hubiera justicia y se hiciera responsable. Queríamos que el carabinero que asesinó a Matías fuera dado de baja y fuera condenado por el homicidio. Obviamente esas cartas nunca fueron respondidas ni tampoco se han hecho responsables del contexto en su conjunto, porque, en el fondo, lo que sucedió fue producto de que la zona está totalmente militarizada y siempre se están resguardando los predios privados. Además durante ese tiempo Patricia Troncoso llevaba varios días en huelga de hambre y tampoco se refirieron en absoluto al tema. De hecho, Bachelet siempre tuvo el descaro de decir que en Chile no existían los presos políticos.
-Hace poco vi un video donde Bachelet aparecía dando un discurso y de pronto aparecías tú interrumpiéndola con gritos que aludían a la muerte de tu hermano ¿Podrías explicarme qué sucedió exactamente ese día?
-Eso fue en la inauguración del Museo de la Memoria y habían invitado a los padres de los hermanos Vergara Toledo. Obviamente ellos no fueron, por dignidad. A mi madre y a mí se nos ocurrió ir a funarla y fuimos bien arregladas y con entrada en mano. La idea era increparla por el contraste de que ella se muestre como una mujer que respeta los derechos humanos, pero la realidad es que hay asesinatos, presos políticos, persecución y hostigamiento policial. Eso para mí es el colmo de la hipocresía, ella promete cosas y hace todo lo contrario. Cuando la increpamos puso una cara terrible y se quedó callada, lo que fue muy placentero para nosotras.
-Además del asesinato de tu hermano hubieron otras tres muertes durante el período de Bachelet, entre quienes se cuentan Johnny Cariqueo, José Huenante y Jaime Mendoza Collío. ¿Cómo crees que se usó la violencia y la represión durante el tiempo de Bachelet? ¿Cómo se entabló la relación entre este gobierno y el pueblo mapuche específicamente?
-En el tema mapuche creo que la forma de llevarlo fue la criminalización y darlo a conocer como un tema de demandas aisladas y no como un tema político general. Aplicó la Ley Antiterrorista sin siquiera escuchar, no fue capaz de resolver las demandas de las personas de una forma real y sólo se dedicó a reprimir y encarcelar. En cuanto al movimiento estudiantil fue más o menos lo mismo: la represión y la criminalización. La única política de gobierno, si se puede llamar así, es dar subsidios a las personas para amortiguar un poco los índices de pobreza. Subsidio para un tractor, para una motosierra, para poder sembrar un poco, pero sólo son parches en el fondo. No se hizo nada concreto para dar solución a las verdaderas demandas, ningún plan de gobierno ni nada. La CONADI siguió funcionando y sigue funcionando igual que ahora, es decir, dividiendo a las comunidades y sin dar soluciones realmente políticas.
-Desde la muerte de tu hermano el año 2008 hasta hoy día ¿Cuáles han sido las respuestas que se han entregado a tu familia por lo acontecido? ¿Qué fue del asesino de Matías? ¿En qué se encuentra actualmente el caso?
-Esa vez que le hice la funa a Bachelet, ella para arreglarla dijo que entendía lo que nosotros pedíamos y que iba a hacer justicia. Curiosamente pasaron dos semanas y el tribunal militar de Valdivia dictó sentencia en el caso de Matías. El caso se trató por la Justicia Militar y el juez era un milico que encontró culpable a Walter Ramírez y lo condenó a 2 años, lo que significa firmar 24 veces. Además se ocuparon mal las leyes, ya que se usó la Ley de Fuga como atenuante, esta ley dice que si tú te arrancas al momento de ser detenido, eso es un atenuante para el carabinero que te asesina. Pero eso nunca ocurrió porque Matías nunca estuvo detenido. Finalmente el caso pasó a la Corte Marcial y la Corte Suprema, donde se le condenó a 3 años y 1 día de pena remitida que en la práctica son 4 años firmando. Esa es la pena por matar a un joven de 23 años y esa es la forma de hacer justicia que tiene Bachelet.
-Hace poco Bachelet se refirió a la muerte de Rodrigo Melinao diciendo que era un suceso lamentable y que ese tipo de situaciones no podían seguir sucediendo ¿Qué opinas tú de estas declaraciones? ¿Te parece contradictorio el actual discurso de Bachelet?
-Ya no me extraña en realidad, esa es su imagen de mujer que entiende y que respeta a la ciudadanía. Esa es sólo una imagen que ella usa para hacerse publicidad, pero en el fondo sólo está preocupada de ganar y por eso promete, pero luego estará preocupada de tener poder y ayudar a las grandes empresas que es lo que siempre sucede.
-Cambiando un poco de tema me gustaría saber cómo crees tú que los jóvenes como Matías pueden llevar la lucha Mapuche dentro de la ciudad.
-Yo creo que uno en la ciudad, como persona o mapuche, debe reconstruirse como individuo y recordar todo aquello que se ha perdido producto de la invasión. Recuperar lo que es el idioma, la cultura y la cosmovisión. En función de eso ver qué están haciendo los demás y ver cómo se puede trabajar con los objetivos que tenga cada quien. Al menos Matías hizo eso, primero estudió mapudungún y leyó mucho de historia, entendió lo que pasó con nuestro pueblo y cómo hemos llegado a estar como estamos y cómo podemos cambiar las cosas hasta volver a ser un pueblo libre. Después de estudiar se fue al sur para conocer cómo era el asunto de verdad y así empezó a ayudar. Igual aquí en la ciudad se puede ayudar a las luchas que se dan allá en el campo, ya sea haciendo actividades de difusión y generando dinero para apoyar a los presos. La lucha genera gastos extra que no son del diario vivir, además del dinero para subsistir es necesario tener para los gastos de los presos y sus familias.
-Matías Catrileo formaba parte de la Coordinadora de Comunidades en Conflicto Arauco-Malleco ¿Podrías contarnos un poco sobre esta organización y sus distintos planteamientos?
-Matías formaba parte de la Coordinadora de Comunidades en Conflicto de las zonas de Arauco-Malleco, que tenía como planteamiendo la recuperación del territorio y generar un control territorial que decide qué se hace y qué no en el lugar. La finalidad es lograr autonomía y autodeterminación como pueblo, es decir, poder autogobernarse y recuperar aquella organización que existía antiguamente donde se asociaban varios grupos transversalmente. Además la coordinadora hizo la diferencia de comenzar una lucha más activa y confrontacional, en el sentido de que se pasó de las ocupaciones simbólicas a las ocupaciones efectivas y productivas, es decir, entrar en parte del territorio inmenso que tienen los empresarios y sembrar allí mismo o dejar a los animales pastando en esas tierras. Por eso Luchsinger hizo la zanja donde murió mi hermano. Además de eso se practicaba el sabotaje y el boicot a las empresas que invadían las tierras de diferentes formas. En ese sentido, con esta forma de luchar la gente dejó de esperar las respuestas inexistentes del gobierno y empezó a usar sus propias manos, lo que siempre trae sus consecuencias como los presos y las muertes.
-En cuanto a la imagen de tu hermano, existen muchos jóvenes que lo recuerdan y se identifican con él desde distintas perspectivas, ya sea desde el movimiento mapuche mismo o desde visiones libertarias o anarquistas ¿Qué opinas tú de que se haya generado esto?
-Nos da mucho gusto a mí y a mi familia que se recuerde a mi hermano. Nosotros también siempre hemos intentado mantener viva la memoria de él para que la gente sepa que hubo un Matías, así como ha habido y hay otros chiquillos que dan a conocer la lucha del pueblo mapuche y otras luchas que existen. Por eso es transversal, hay cabros que son libertarios y se ven reflejados en él porque su lucha también era anarquista y antisistémica. Ahí yo veo muchas cosas en común entre el mapuche y el libertario, la lucha es similar y el enemigo es el mismo.
-A modo de opinión personal ¿Ves tú alguna posibilidad o esperanza en el sistema electoral? ¿Votarías por alguno de los candidatos a la presidencia?
-Por Bachelet no, obvio. La derecha menos. A veces escucho algunas cosas buenas y discursos que suenan bonitos, pero ya perdí la fe por completo en el sistema electoral. Además lo que son los gobiernos de postdictadura acá no son muy humanos, por decirlo así. Y en realidad no iré a votar ni me interesa tanto tampoco, no veo la solución en la vía electoral ni en la imagen de alguien que esté regulando todo desde un poder central.
Por Roger Ancamilla
Fuente El Ciudadano