Taita Segundo Tombé Morales, un legado que nos desafía y convoca
Ayer 16 de julio se nos fue el Taita Segundo Tombé Morales, líder reconocido en Colombia por crear, alimentar y caminar colectivamente el primer Plan de Vida desde el pueblo Misak. No exento de contradicciones como todas y todos, luchó con y por su pueblo y hoy nos deja un legado histórico que debemos seguir haciendo posible más allá de lo que nos permite el sistema. Justamente en este mismo sentido, él Taita nos habló hace un par de años desde su territorio y mirando retrospectivamente lo que se ha profundizado hoy, nos dijo: «Pensamos que la Constituyente era nuestra salvación. El error fue entregarle nuestras banderas al estado, pero la grave confusión es que a través de los estados todas las organizaciones se han sentado a negociar. Hoy las mesas de negociación son la compra y venta de los pueblos indígenas. Llegamos a eso» (apud. Zibechi, 2015).
El legado que nos deja el Taita Segundo al igual que otras y otros mayores que lucharon y regresaron a la Madre Tierra, debería ser mucho más que un homenaje sentido y sincero. Sus vidas hicieron parte de debates y luchas colectivas. Por ello, esas vidas resaltan y señalan desafíos, contradicciones, errores y por qué no, asuntos que por diversas razones se ocultaron y no pudieron tratarse. Estos silencios pesan como cárceles para nuestra sabiduría y libertad. Son cargas que nos conducen a complicidades, mal entendidos y resentimientos. Honramos al Taita Segundo Tombé evocando palabras, acciones y silencios, para que mirándonos ante el espejo de su recorrido y memoria ni la impunidad ni el vacío que nos conduce a repetir los errores sean lo inevitable de nuestro camino. A continuación compartimos un escrito que nos envía Diana Jembuél intentando presentar un poco del legado de lucha con las prácticas y saberes que nos deja el Taita Segundo Tombé Morales. Pueblos en Camino
Murió el Taita Segundo Tombé Morales, autor de primer Plan de Vida en Colombia
Este líder, conocido por su acierto en el movimiento indígena en Colombia, siendo el autor intelectual del primer Plan de Vida, como aporte fundamental del movimiento guambiano, hoy más conocido como pueblo Misak, en la lucha contemporánea y moderna de los indígenas. Esta apuesta política y social lo concretó siendo gobernador del cabildo de Guambia entre los años 1993 y 1994, en Silvia – Cauca.
En su trayectoria política y social como lo diría el mismo taita, empezó muy joven, cuando en su vida de estudiante de bachiller acompañaba en el surgimiento del movimiento indígena en Colombia, su compromiso y convicción lo llevó a no perder los detalles más mínimos de ese surgimiento de la lucha de los pueblos con sus líderes Misak (guambianos) de Silvia y nasa del municipio de Jambaló en el Cauca.
En los años 1973 y 1975 con la ruptura del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) y el movimiento guambiano o Misak, empezaron junto con los demás líderes a establecer relaciones organizativas para apoyarse con los indígenas Pastos, Kamentsas y algunos Ingas del Valle del Sibundoy, que posteriormente se concretaría con la primera gran marcha de gobernadores, desde Ipiales hasta la Ciudad de Bogotá. Haciendo reclamos ante el estatuto del presidente Turbay, un estatuto en contra de los pueblos indígenas. Para 1980, ya habían conformado el movimiento Autoridades Indígenas del Sur Occidente Colombia (AISO) y para llegar a la Asamblea Nacional Constituyente llegaron con el nombre de Autoridades Indígenas de Colombia (AICO).
En el año 2011, en el marco de las investigaciones del Centro Nacional de Memoria Histórica, como comunicadores Misak, algunos tuvimos la oportunidad de escuchar al taita Segundo cuestionando a Pablo Tatay del CRIC y al Movimiento Guerrillero Quintín Lame, por la persecución política y las bajas de líderes Misak, expresiones que el pueblo guambiano había reservado por muchos años. Esta investigación lo pueden encontrar en el libro “Nuestra Lucha ha Sido Nuestra Viva”, investigaciones de Víctor Bonilla y Daniel Ricardo Peñaranda.
El Taita Segundo Tombe Morales, nació el 21 de noviembre de 1953 en el territorio ancestral del Pueblo Misak, en las frías montañas departamento del Cauca en la vereda Pueblito- municipio de Silvia – Cauca.
Su gente del pueblo Misak lo conocían como el Taita Segundo Tombe Morales, taita de carácter contundente con su experiencia desde el territorio y en el auge del movimiento indígena, como taita, en sus discursos eran cordiales y contundentes. El taita, daba fuerza para que el pueblo Misak y las nuevas generaciones asumieran el camino de la comunitariedad de las shuras y shures (mayores y mayoras) de nuestra Ancestralidad. La trayectoria en la comunidad, lo llevó a que por primera vez en la historia del cabildo de guambia lo reeligen como gobernador, fue alcalde del municipio de Silvia en el periodo 2001 – 2003 y ocupó cargos de representación nacional en Autoridades Indígenas de Colombia (AICO), cuando los Misak pertenecían aún en ese movimiento. En los últimos años, de vez en cuando venía acompañando en el Cauca a Autoridades Tradicionales – Gobierno Mayor.
Con su gran carácter de taita como Ex gobernador del pueblo Misak y Ex alcalde del municipio de Silvia transportaba la fuerza, identidad, cosmovisión e identidad; A su esposa, sus hijas e hijos nuestro sentido de acompañamiento desde los nuevos espacios de procesos originarios.
En los últimos años, muchos taitas están vetados por el Cabildo de Guambia, cabalgando en el lomo de las circunstancias, ausentes de procesos de lucha y la nueva generación de “autoridades” en la actualidad no tienen en cuenta a estos taitas, que, con su experiencia, así como el taita Segundo seguirían aportando mucho. El año pasado, casi que de manera reservada y desobedeciendo, el Colegio Agropecuario brindó un homenaje a estos taitas y ahí estuvo el taita Segundo Morales Tombé.
La situación en mi territorio es complicada, justamente con relación a lo anterior, comparto las palabras de Luis Guillermo Vazco: “Un grupo amplio de jóvenes estudiados, del cual hacen parte algunas autoridades, se consideran a sí mismos guambianos del siglo XXI y, en las asambleas, han llegado hasta hacer callar a los mayores con el argumento de que ellos ya tuvieron su tiempo, cuando hicieron lo que querían, y que ahora les corresponde a los jóvenes hacer su voluntad, son quienes encabezan y mantienen este proceso, aunque guardan las apariencias y los discursos, convirtiéndose en “cascarones de indio” y ya no en verdaderos hijos del agua, afirmación esta que les parece pasada de moda, no científica y hasta supersticiosa. En lo cual, vale la contradicción, tienen el completo respaldo de los grupos cristianos más extremistas del Resguardo”.
Nuestro Taita Segundo se nos va materialmente, justo por estas fechas, cuando hace 37 años proclamaron el Manifiesto Guambiano. Precisamente el 19 de julio de 1980, los indígenas guambianos entraron a recuperar la hacienda Las Mercedes, hoy, conocido como Santiago, sede de las asambleas y decisiones de los Misak. Seguramente el 19 julio de los presentes, sea por última vez que acompañemos al taita para despedir al kansrɵ del mundo Misak.
Para finalizar, enviamos nuestras palabras de aliento a su esposa, mama Teresa Quelal, sus hijas e hijos, y mucha fuerza desde Bogotá. Ya que el taita, desde el caminar del ser Misak Misak, el día 16 de Julio del 2017, parte hacia otros espacios KANTRɵ y cada noviembre nos visitará a la familia y a la comunidad.
Autora: Diana Mery Jembuél
Julio 17 de 2017
nos deja un buen legado…