«Palabras del hombre que nació dos veces»

Esta ponencia fue presentada por Hugo Blanco, luchador de la primera reforma agraria en el Perú, durante el 5to aniversario del movimiento de resistencia de la comunidad de Cherán K’eri, los días 14, 15 y 16 de abril, en Michoacán, México, “Por la seguridad, justicia y reconstitución de nuestro territorio”.

«PALABRAS DEL HOMBRE QUE NACIÓ DOS VECES»

Yo soy Quechua. A los pueblos indígenas nos llaman salvajes y tienen razón, porque somos salvajes, no somos domesticados. El perro es un animal domesticado, el lobo es un animal salvaje. Nosotros no estamos domesticados. También somos primitivos y en eso también tienen razón porque representamos lo que antes la humanidad entera era, porque mantenemos los principios de la humanidad en sus orígenes, nuestras características.

Las características de los pueblos indígenas son la horizontalidad, donde no hay gente que manda y gente que obedece, la gran solidaridad, el gran amor y el respeto por la naturaleza, que la felicidad no la da el dinero sino vivir satisfactoriamente. Esos son los principios de los indígenas del mundo.

Con la civilización vinieron los que mandan y los que obedecen. Primero fueron las castas y después las clases, ahora estamos gobernados por el capitalismo transnacional, por las grandes empresas transnacionales que gobiernan el mundo. Ellos atropellan la naturaleza, atropellan a la humanidad y no les importa. Su único principio es cómo ganar más dinero en el menor tiempo posible y si para eso tienen que atropellar a la naturaleza y a la humanidad lo hacen, si se les dice “tus hijos ya no van a tener agua”, “ese es problema de ellos”, mi problema es cómo ganar dinero en el menor tiempo posible.

Ahora esa sociedad está en crisis, vivimos en un mundo gobernado por las transnacionales que están en crisis, es una crisis económica, una crisis política, una crisis ética, una crisis ecológica, y toda clase de crisis.

Si por cien años más van a seguir gobernando las transnacionales, la especie humana va a desaparecer, con solo el calentamiento global. Han muerto muchas especies animales y vegetales, también va a morir la especie humana.

Afortunadamente celebramos la recuperación de la autonomía por el pueblo de Cherán, ahí donde unos narcotraficantes coordinados con los gobiernos locales, con el gobierno central, estaban robando la madera del bosque de Cherán, hasta que unos jóvenes escucharon el llamado del ojo de agua, que les decía que estaba a punto de morir, y se levantaron. Les apoyó todo el pueblo, principalmente son simbólicas las fogatas que muestran el apoyo del levantamiento de las mujeres en apoyo a ellos y expulsaron a los invasores. Expulsaron a los invasores y pusieron su propio gobierno, donde no hay un presidente, no hay un secretario general, es la colectividad la que manda, mediante el concejo que propusieron y que reemplazaron.

Eso nos muestra el retorno del mandato de la colectividad que al principio había en todo el mundo y que fue desplazado por la verticalidad. Si el mundo continúa gobernado por las empresas transnacionales, como digo, dentro de 100 años ya no va a existir la especie humana. Nuestra especie puede sobrevivir si seguimos los pasos de Cherán. Cherán nos muestra que es posible sustituir el mandato actual de las transnacionales por el gobierno de la colectividad. Por eso nos devuelve la confianza en que la humanidad puede gobernarse. Por eso agradecemos a Cherán por la supervivencia de la humanidad, nos da optimismo, nos demuestra que la humanidad puede sobrevivir si toda la humanidad toma los pasos de Cherán, de gobernarse a sí misma de forma colectiva. Por eso, gracias Cherán.

Hugo Blanco

Pueblos en Camino, abril 17 de 2016